La Eurobubble contenía el aliento estas semanas ante el inminente anuncio de la segunda Comisión von der Leyen, precedido de ciertos dramas, algunos menores, como inesperados retrasos o bailes de candidatos para mejorar la paridad del colegio de comisarios (los casos rumano y esloveno) y otros mayores, como la estrepitosa caída del comisario francés Thierry Breton, con marcados tintes tragicómicos muy inusuales en Bruselas. La presentación de la nueva estructura de la Comisión y la propuesta de asignación de carteras es, sin duda, el momento álgido del cambio de ciclo institucional ...