El juez ha procesado al enfermero religioso Amando A. del colegio Jesuitas de la calle Casp de Barcelona por un delito de agresión sexual a una alumna, al que podría sumarse un segundo si prospera el recurso de las acusaciones, mientras otras cuatro denuncias están prescritas.
Según han informado a EFE fuentes jurídicas, el titular del Juzgado de Instrucción número 7 de Barcelona ha citado este miércoles al investigado para tomarle declaración indagatoria y comunicarle su procesamiento, trámite preceptivo antes de que las acusaciones presenten sus escritos y el caso se envíe a juicio.
El religioso ha sido procesado por el momento por una supuesta agresión sexual a una exalumna del centro, aunque tanto la Fiscalía como la acusación particular ejercida por las víctimas han presentado recurso para que sea juzgado por dos delitos.
Dada la posibilidad de que esos recursos prosperen, en la comparecencia celebrada este miércoles el magistrado ya ha comunicado al religioso que está procesado por dos delitos de agresión sexual.
El religioso, antiguo responsable de la enfermería del colegio, acumulaba seis denuncias de exalumnas que lo acusaban de haber abusado de ellas entre los años 2000 y 2002, cuando tenían entre seis y nueve años.
No obstante, el magistrado ha considerado que cuatro de esas denuncias ya han prescrito, por lo que la causa únicamente debe seguir adelante por uno o dos casos de supuesta agresión sexual.
En su comparecencia ante el juez, el religioso investigado se ha acogido a su derecho a no declarar y se ha limitado a afirmar que no está conforme con el procesamiento dictado por el juez, han añadido las mismas fuentes.
Tanto la Fiscalía como la acusación particular consideran que el centro Jesuitas de Casp debería sentarse en el banquillo como responsable civil subsidiario por no haber impedido los casos de agresión sexual ocurridos en la enfermería de la escuela.
El pasado mes de julio, Jesuitas de Cataluña dio a conocer los resultados de la auditoría interna llevada a cabo para determinar el alcance de los casos de abusos sexuales a menores ocurridos en el seno de la orden religiosa: cifraron en 44 los agresores y en 145 las denuncias presentadas, la mayoría sin recorrido legal por prescripción o muerte del autor.
Los responsables de Jesuitas de Cataluña facilitaron en la rueda de prensa el nombre completo de 14 religiosos condenados o con indicios claros de haber perpetrados agresiones sexuales, entre los que figura el responsable de la enfermería del centro de la calle Casp, informa Efe.