Las obras de restauración de la catedral de Palencia han dejado al descubierto varios e inesperados restos arqueológicos de gran relevancia. Fue al realizar catas en el suelo del templo cuando desvelaron uno de los mayores secretos que se ocultaban bajo sus cimientos: una cripta abovedada de época prerrománica que llevaba siglos escondida bajo la capilla de San Isidro. Se trata de un hallazgo excepcional ya que podría incluso llegar a reescribir la historia de la seo y revelar estructuras que podrían conectar la catedral con el antiguo hospital de San Bernabé. Este descubrimiento podría ofrecer información crucial sobre la Palencia prerrománica y la evolución de la ciudad durante la Edad Media. Además, podría arrojar luz sobre la vida religiosa, la arquitectura y las técnicas constructivas de entonces. Estos hallazgos también podrían modificar la comprensión actual sobre los orígenes y la importancia histórica de la catedral y su entorno. «El descubrimiento es muy importante y lo que queremos ahora es que se continúe con las obras de excavación para poder determinar el verdadero alcance de este hallazgo. Al principio no sabíamos con exactitud su importancia pero, poco a poco, nos hemos ido dando cuenta del tesoro que tenemos entre manos», explicó a Ical el delegado diocesano de patrimonio de Palencia, José Luis Calvo. «Podría cambiarlo todo o ampliar los conocimientos del suelo donde se asienta nuestra Catedral gótica. Por lo tanto, sí que es interesante que se siga investigando». Calvo ha reconocido que, ahora mismo, hay muchas preguntas sin resolver y su mayor deseo es obtener respuestas de carácter científico. «Podría marcar un antes y un después o también podríamos ampliar los conocimientos que tenemos de la catedral. Hasta el momento , el elemento más antiguo del templo era la cripta de San Antolín que data del siglo VII pero, ahora, todo eso puede cambiar. Sin embargo, insisten en que hay que ser prudentes y esperar a que sean los científicos los que fechen los nuevos descubrimientos», puntualizó. Una vez se determine la cronología y el contexto de estos restos, podrían surgir narrativas históricas diferentes a las previamente aceptadas sobre la fundación y desarrollo del templo. «Pueden aparecer más restos así que, de momento, habrá que esperar». Sin embargo, lo cierto es que estos hallazgos ya han despertado el interés de académicos, políticos y estudiantes. De hecho, investigadores de la Universidad de Oxford y de la Universidad de Navarra han viajado hasta Palencia para ver en primera persona los recientes descubrimientos de la catedral de San Antolín. «Esto podría conllevar en el futuro la creación de una escuela, el desarrollo de nuevas áreas de estudio o el impulso de programas especializados en torno a la historia prerrománica y medieval de la región. Todo, para conocer la génesis, la presencia o la antigüedad de todo esto», señaló el deán de la Catedral, Dionisio Antolín. Confía en que este interés académico contribuya a dar relevancia a un descubrimiento que podría aportar nueva información sobre la historia prerrománica y medieval de la Comunidad, generando un mayor entendimiento de la evolución de la catedral y de Palencia. «La participación de estos expertos podría ser clave para profundizar en el estudio de estos restos arqueológicos ya que además, se encontraron muros bien conservados. Eso podría llegar a ofrecer una nueva perspectiva sobre la historia antigua de la ciudad», puntualizó. Por eso, dijo, es importante continuar adelante con las excavaciones para determinar la cronología exacta y la importancia histórica de los restos. «Todas las autoridades que se han interesado por las obras han manifestado su buena intención de impulsar un proyecto de excavación pero, lo cierto, es que de buenos deseos no se vive. A la realidad hay que hacerla frente con los hechos y hay que ponerse manos a la obra porque puede tratarse tan solo de la punta del iceberg. Se han dado los primeros pasos pero, a día de hoy, es imposible saber cuándo se puede acabar y cuál puede ser el límite de todo esto». Para conseguirlo, dicen, será imprescindible el apoyo de las administraciones. «Es el momento de aunar esfuerzos. Nosotros en solitario no podemos afrontar una obra de tal envergadura y necesitaremos del apoyo de las instituciones nacionales, autonómicas, provinciales o culturales», reivindicó el delegado diocesano de Patrimonio. Una idea en la que coincide con el deán de la catedral que considera que todo esto podrá suponer un revulsivo en el número de visitantes y repercutir de manera positiva en la economía de la ciudad. «Serán muchos los expertos que quieran apreciar los descubrimientos en primera persona y eso, permitirá reforzar el turismo de carácter científico», aventuró Dionisio Antolín. Cabe recordar que la Catedral de Palencia recibió más de 20.000 visitas en los primeros cinco meses de 2024. El número de turistas crece de manera mensual y el templo se está consolidando como uno de los principales recursos turísticos palentinos. Sobre la procedencia de las visitas nacionales, Madrid sigue siendo el lugar de origen más elevado seguido de Castilla y León, Barcelona y Navarra. Ahora, solo el tiempo podrá decir si estos últimos descubrimientos son el empujón necesario para que la catedral de Palencia deje de ser la Bella Desconocida para convertirse en la Bella Reconocida. La Diócesis de Palencia ha impulsado la campaña 'Una Catedral con vistas'. La iniciativa persigue ayudar a financiar, a través de donaciones económicas voluntarias, la construcción de una pasarela que permita visitar espacios ahora restringidos de la seo. En concreto, se proyecta la instalación de una pasarela sobre las cubiertas de la girola y los triforios de la cabecera del templo con el objetivo de ofrecer puntos de vista «inéditos y sugerentes» tanto de la ciudad como del propio monumento. Una manera de reforzar los atractivos de ambas y brindar una experiencia «singular, novedosa, inolvidable» para el visitante. Aquellos que lo deseen podrán realizar los donativos a través de la cuenta bancaria titular del Cabildo de la Catedral o por Bizum.
