Un grupo de élite militar de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena), apoyados por miembros de la Guardia Nacional (GN), capturaron en Villaflores, Chiapas, a Marco Aurelio Hernández, alias “El Peligro”, un ex agente ministerial de Chiapas, que trabajaba para el Cártel Chiapas y Guatemala, que se disputa con el Cártel de Sinaloa, el control de la entidad y la frontera sur.
En un operativo sigiloso, el grupo de élite del Ejército Mexicano que llegó a Chiapas hace poco más de un mes, empezaron a seguir la pista de El Peligro, pues al ser originario de esa región donde fue capturado ayer, conocía a perfección todos los caminos de terracería y carreteras, todos los atajos, casas de seguridad y ranchos entre los que se movía.
No fue fácil capturarlo y su jerarquía en la estructura criminal cimbró a ese cártel, cuyos integrantes desplegaron una irrupción armada en la cabecera municipal de Villaflores, causaron pánico y terror, enfrentando a los uniformados estatales y federales que se cruzaron en su camino.
Escuelas cerraron sus puertas, negocios bajaron sus cortinas, algunos pudieron videograbar el ir y venir de camionetas con hombres armados y otros corriendo por las calles con sus fusiles en mano. Las detonaciones parecían “triquis” (cohetería), dijo una señora que lloraba por no poder por sus hijos a la escuela.
A El Peligro se le capturó junto a otras siete personas, en una casa de seguridad, donde también le aseguraron un arsenal, varios vehículos, camionetas y motocicletas, que fueron trasladadas a Tuxtla.
Aunque ninguna fuente oficial de las fuerzas armadas dio detalles del operativo, fotos de la captura de este jefe del crimen organizado circularon en redes sociales.
En los enfrentamientos callejeros perdió la vida un elemento de la Guardia Nacional, de nombre Edgar Enrique Leciano Cruz, reportó la página de “Policías en Acción Chiapas”, que se elabora con reportes policiacos que se filtran los propios uniformados de forma anónima.
De forma extraoficial, testigos del Hospital Militar de Tuxtla reportaron el ingreso de entre cinco y seis elementos del Ejército Mexicano, heridos de bala y trasladados hasta ese nosocomio, luego de haber estado en los incidentes violentos de Villaflores.
Hasta ahora, ni la Sedena, ni la Marina, ni la Guardia Nacional, ni La FGR o la FGE, han dado más detalles de este operativo, que fue apoyado con helicópteros artillados de la Fuerza Aérea Mexicana.