El ministro de Transportes y Movilidad Sostenible, Óscar Puente , ha concretado este viernes 6 de septiembre la propuesta del Gobierno central para la integración del ferrocarril en Granada, que implica una obra de 230 millones de euros con un periodo de ejecución de ocho años y, lo que resulta más novedoso, que descarta el soterramiento de las vías del AVE. En un desayuno informativo organizado por el periódico Ideal, Puente ha dicho que se trata de un proyecto «ambicioso» pero no definitivo. Se ha comprometido a negociarlo con el Ayuntamiento de Granada , que es quien tiene las compentencias en el tramo urbano del trazado. La alcaldesa, Marifrán Carazo , que ayer criticó que llevaba un año esperando a reunirse con el ministro y le reprochó que no aprovechara su visita de hoy para hacerlo, estaba en ese mismo acto. Óscar Puente ha concretado que la obra se hará en cuatro tramos: el primero afectará a la estación, que se mantendrá donde está -entre los múltiples proyectos anteriores había algunos que sugerían que dejara de estar en la Avenida de Andaluces - pero se reformará para mejorar su capacidad. Además, el Ejecutivo está dispuesto a trabajar en el entorno de esa estación ferroviarias para crear un «gran parque urbano de zonas verdes». El Ministerio prevé invertir también en el barrio de La Rosaleda , cercano a la estación. A su juicio necesita «una intervención drástica» que conseguirá como resultado algo «parecido» a un soterramiento pero que no es tal. En cuanto al otro barrio afectado, el de La Chana , la idea es crear dos zonas verdes paralelas al ferrocarril para «mejorar la topografía urbana y permitir una nueva conexión peatonal para la zona». El proyecto, además, propone la construcción de un viaducto sobre el parque y los tramos peatonales, así como trabajos en la carretera de Málaga con la implantación de una pasarela urbana. Puente ha dicho que prefiere las «integraciones ferroviarias» antes que los soterramientos, sobre todo porque éstos cuestan mucho más dinero y tiempo. Soterrar las vías, ha afirmado, supondría unos 760 millones y entre 14 y 15 años . Su iniciativa, en cambio, fija el plazo en ocho años y el presupuesto, en 230 millones. «Las dos obras implican una gran intervención, pero en el soterramiento hablamos de un movimiento de tierras muy importante y de un impacto mayor de la movilidad», ha dicho el ministro, que tendrá ahora que hablar con el ayuntamiento y la Junta de Andalucía para consensuar un proyecto definitivo. Marifrán Carazo, por su parte, no ha querido valorar en profundidad la propuesta ministerial hasta que el ayuntamiento «la analice al detalle, tramo a tramo, y vea la afección que tendrá en los barrios «, pero sí ha adelantado que el proyecto que ha ofrecido Puente no es nuevo. De hecho, ha recordado que en marzo de 2023 ya salió a la luz, pero «nunca se presentó de manera oficial, sino que se guardó en un cajón». Eso significa, ha añadido, que por lo pronto ya se ha perdido «un año y medio» para intentar avanzar en la integración ferroviaria, algo que, ha dejado claro, tienen que hacer «todas las administraciones juntas «, incluyendo la Junta de Andalucía. Ha insistido en que está molesta porque aún no se ha concretado la reunión que solicitó con el responsable de Infraestructuras hace ya un año -el ministro ha dicho que se cerrará en breve- pero que aun así ha decidido acudir al acto con él «por lealtad institucional y para seguir ofreciendo nuestra mano tendida«. Por otra parte, Óscar Puente también se ha comprometido a estudiar «con seriedad» la conexión por tren entre Granada y el Puerto de Motril , una demanda histórica que, a su juicio, tiene dos grandes inconvenientes. Uno es la financiación, porque esa línea no está prevista en el mapa europeo ferroviario, y otra su complejidad, porque incluiría túneles y viaductos y discurriría parcialmente por el ámbito del Parque Natural de Sierra Nevada, lo que implicaría un exhaustivo análisis del impacto medioambiental.