Comienza septiembre y, también, para los americanos, la cuenta atrás de la campaña electoral para las elecciones de noviembre. Al parecer, el respaldo de famosos a los candidatos es algo fundamental para echar hacia adelante al personaje y proporcionarle más votos, más seguidores, y en ese sentido se ha corrido la especie de que Taylor Swift está muy cercana a Donald Trump, con lo cual, los del lado contrario, los Kamalistas, están buscando el equivalente para la candidata demócrata quien, de momento, cuenta tan sólo con Oprah Winfrey, que no es mal pájaro por la popularidad que arrastra, y así lo demostró con su sobresaliente presencia en la Convención Nacional Demócrata. Los apoyos del famoseo cuentan y mucho. Aquí, en España, hemos tenido a los de siempre, o sea, Ana Belén, Víctor Manuel, el inefable Amodóvar y su "trupppe" y a Miguel Bosé, favoreciendo y promoviendo el éxito de la izquierda, los de la ceja no se nos olvidan a ninguno, y anteriormente, en tiempos de Felipe y Guerra a las difuntas Sara Montiel o Concha Velasco; había también intelectuales o sucedáneos de intelectuales, que frecuentaban una bodeguilla que se hizo construir el primer presidente socialista de la democracia, donde su mujer Carmen Romero reinaba entre los Muñoz Molina, los Javier Marías, los Llamazares y un sinfín de escritores que despuntaron en los 80, a quienes se les denominó los ciento cincuenta novelistas de doña Carmen; ellos gozaban de prebendas editoriales y de unas promociones nunca vistas anteriormente, además de puestazos de categoría en las ciudades donde el Instituto Cervantes fue abriendo sus embajadas culturales de España. Hoy la dirección del Instituto la ostenta Luis García Montero, conocido ultra comunista, que goza de un importante sueldo (112.000€) por atender la tienda al antojo de Sánchez. Lo de los americanos es otra historia; el atractivo George Clooney apoyó incondicionalmente a Biden en la anterior campaña, pero es que apoyar a Trump, es duro. ¿Será cierto lo de Swift? Pudiera ser que, a falta de la de Pensilvania pudiera contratar a Karol G, paisa de Medellín que arrastra multitudes…