El personal docente y no docente de la Universidad de las Madres de Plaza de Mayo denunció hoy que la intervención gubernamental que pesa sobre la institución cerró la sede de esa casa de estudios en el barrio porteño de Monserrat. Fuentes gubernamentales, por su parte, acusaron a un grupo de personas de haber "tomado por asalto" el lugar.
La consigna de la Policía Federal se mantuvo desde horas de la mañana hasta las 16, cuando fue retirada del lugar. Durante ese período, el personal docente y no docente se vio impedido de moverse en el edificio y quien fuera designada rectora Cristina Caamaño dijo haberse quedado encerrada.
"Cuando llegamos no nos dejaron entrar, después no nos dejaron salir. Se vivieron momentos de mucha tensión. Se armó un doble cordón de policías en la puerta de una universidad. Una locura total", graficó Caamaño. En ese sentido, dijo que fue una maniobra del interventor Eduardo Maurizzio "que gana cinco millones de pesos por mes y nunca pudo venir a la Universidad porque no se lo reconoce", añadió.
Según se explicó desde de la Universidad, durante el fin de semana se rompió una cortina metálica que cubre la entrada al edificio que se comparte con la Procuración del Tesoro. Ante esa situación, el ingreso a las aulas tenía que hacerse por la puerta lateral, algo que se vio impedido por el personal policial.
"A la rectora y a algunos compañeros les dijeron que podían pasar a buscar cosas, pero después no los dejaron salir. Las Madres sacaron un comunicado y convocamos a un escribano para dejar constancia sobre la situación. Cuando quisimos abrir la persiana se desplegó un operativo de la Policía Federal. Ya éramos 200 personas que no entramos en la provocación", comentó el docente Demetrio Iramain.
En ese sentido, dijo que la Policía sólo decía tener un correo electrónico del interventor-normalizador designado por el Gobierno nacional, prohibiendo el ingreso al edificio.
"Para no dejar entrar a alguien a una universidad tiene que haber una orden del juez o del Congreso y no un correo enviado desde una cuenta de Gmail que puede sacarse cualquiera. Todo fue irregular", apuntó Iramain.
Por su parte, fuentes de la cartera educativa señalaron que la "Universidad viene de un caos administrativo sostenido por meses" y "no estaban cumplidas las mínimas medidas de seguridad mínimas".
Por ello, "el rector normalizador decidió cerrar la sede hasta poder cumplir con esos estándares".
"Tras ello, la sede fue tomada por asalto, en un grupo presidido por la señora Caamaño y un grupo de personas que la acompañaba, que agredieron en el ingreso al personal del Ministerio de Justicia y como respuesta, el mismo Ministerio de Justicia procedió a pedir un cordón policial para protección, que el rector normalizador pidió retirar", abundaron.
La designación de Caamaño como rectora de la Casa de Estudios fue cuestionada en la Justicia y a mediados de agosto fue desplazada por haber sido elegida en una asamblea cuestionada por su legitimidad.
Durante el transcurso de la jornada, la Asociación de Madres de Plaza de Mayo emitió un comunicado en el que se afirma que viola la autonomía y pretende "criminalizar a los trabajadores". Caamaño señaló que "a pesar de la tensión generada" las clases se darán con "normalidad" en horas de la tarde.