En un rincón apartado de los Andes peruanos, se encuentra una de las ciudades más afectadas por la contaminación de mercurio a nivel mundial. Este problema, además de representar una crisis ambiental, también es un grave riesgo para la salud de miles de personas que habitan en esta región.
Tanto así que la situación ha atraído la atención de investigadores, organismos internacionales y gobiernos, que buscan soluciones a un problema que ha persistido durante décadas.
Una de las ciudades más contaminadas con mercurio, conocida como la tierra del mercurio, se encuentra en el departamento de Huancavelica, Perú.
Esta región ha sido históricamente afectada por la minería, especialmente desde la época colonial, cuando se utilizaba mercurio en el proceso de extracción de plata y oro.
La contaminación persiste hasta hoy debido a prácticas mineras artesanales que aún utilizan este metal, lo que ha llevado a niveles alarmantes de mercurio en el medio ambiente y graves riesgos para la salud de la población local.
Huancavelica fue declarada en emergencia ambiental debido a la grave contaminación por metales pesados, particularmente mercurio, que ha afectado la región desde la época colonial.
Las mediciones recientes realizadas por el Consejo de Salud Ambiental y la Universidad Nacional de Huancavelica confirmaron que en la ciudad de Huancavelica y la comunidad de Sacsamarca, los niveles de mercurio, arsénico y plomo exceden los estándares establecidos por el Ministerio del Ambiente, poniendo en riesgo la salud de miles de personas.
Huancavelica tiene una participación modesta en la minería nacional, ocupando el cuarto puesto en producción de arsénico y bismuto, y posiciones más bajas en otros metales.
A pesar de su baja inversión en minería en 2023 (apenas un 0.9% del total nacional), la contaminación histórica y presente continúa siendo un problema significativo.
Las concesiones mineras cubren el 40.30% de la superficie del departamento, y la gestión ineficaz de los pasivos ambientales mineros contribuye a la crisis de salud y ambiental que afecta a las comunidades locales.
Según la Organización Mundial de la Salud (OMS) y la Agencia de Protección Ambiental de Estados Unidos (EPA), algunos de los efectos más comunes incluyen: