Comienza a recuperar Marc Márquez aquella sonrisa con la que se presentó en el Mundial. Cuando todo era fácil para él, cuando encadenó un título y otro y otro y otro más. Pero llegaron las dificultades, resumidas en aquella caída en 2020 cuando comenzó su peregrinaje por la cara amarga del deporte. Cuatro temporadas después, más de mil días sin subirse a lo más alto del podio, Márquez vuelve a sonreír: el mejor del fin de semana del Gran Premio de Aragón, el mejor en la pelea por la pole, segunda de la temporada, y el mejor en la carrera al esprint. Líder como hacía tiempo que no se lo veía, tomó la salida de la carrera corta y no miró atrás. Aunque se fue largo en la primera vuelta en el característico muro del trazado aragonés, Márquez no tembló ni se le cruzaron viejos fantasmas ni problemas en las motos y en su brazo. Abrazó las curvas sin miedo ni respeto por sus rivales, que sí sufrieron mucho. Márquez no, no este Márquez que comenzó a sumar ventaja con respecto a Jorge Martín y Pedro Acosta -segundo y tercero- en cada giro, medio segundo y medio más y otro medio hasta encontrarse solo en la pista. Hasta encontrarse encima de la moto, señalándose, más de mil días después, vuelve a saborear una victoria. Primer triunfo en esta nueva modalidad de carreras con la que sumó sus primeros doce puntos del sábado. A la espera de refrendar esta superioridad que recuerda a otras de otros tiempos en el domingo de verdad. Pero se ha exhibido como acostumbró al personal en su llegada a la élite, aunque con la madurez y las cicatrices que todavía aportan más orgullo a estas once impecables vueltas. Por detrás, Martín y Acosta, algo más precavidos en un trazado complicado del que se marcharon sin terminar Aleix Espargaró y Johann Zarco. Y con puestos inusuales para pilotos como Pecco Bagnaia, que no pudo controlar el desgaste de los neumáticos y terminó noveno. "Me siento superbién. Es increíble delante de esta afición. Ha sido un gran fin de semana. He salido un poco rígido, pero he conseguido tranquilizarme. Lo celebraremos, por supuesto, pero sabemos que el día grande es mañana, es cuando tengo que estar más concentrado", comentó el piloto en el mismo escenario donde volvió a disfrutar de ser el centro de la foto.