Los coletazos del caso Audios o caso Hermosilla le llegaron muy de cerca a la derecha chilena, debido al vínculo que existiría entre el abogado Luis Hermosilla y Andrés Chadwick (UDI), relación en la que también se vio salpicado el exfiscal Manuel Guerra, por el recordado “caso Penta”.
Desde la coalición de Chile Vamos han llevado a cabo una estrategia basada en el silencio y el descarte, más allá del pronunciamiento de varios de sus figuras en los últimos días. Partiendo por la alcaldesa de Providencia y presidenciable, Evelyn Matthei, quien aseguró que la investigación debe seguir hasta que “caiga quien caiga”.
Por otro lado, Mario Desbordes (RN), en entrevista con CNN Chile, mantuvo el mismo discurso, indicando que tanto Chadwick como Guerra deben “ponerse a disposición de la justicia”.
En ese contexto, las directivas de los principales partidos de Chile Vamos abordaron las implicancias para la colectividad que tienen los nuevos antecedentes. El secretario general de la UDI, Juan Antonio Coloma, descartó un pronunciamiento a fondo respecto a que militantes del partido estén implicados con Luis Hermosilla y desvió la atención hacia el conflicto entre la defensa del abogado y el Gobierno actual.
“No vamos a entrar en una pugna comunicacional o en la estrategia de la defensa o los acusadores en un tema que tiene resolverse entre el abogado Hermosilla y el Gobierno”, dijo de entrada el diputado.
Posteriormente, acudió a una frase constantemente repetida por los timoneles de oposición: “Hay que dejar que las instituciones funcionen”. “Como lo hemos dicho desde el día 1, vamos a respetar todos y cada uno de los fallos judiciales”, remarcó Coloma en cuanto al flanco abierto por el ex ministro Chadwick y su posible implicancia en el caso.
Por su parte, Rodrigo Galilea, presidente de Renovación Nacional, se plegó al mensaje de que si hay algún implicado, éste debe afrontar a la justicia, independiente de su militancia política.
“Si es que hay alguien que tiene que responder, dar explicaciones o concurrir, debe hacerlo por orden de la justicia. Nadie está más allá de eso. Nosotros solo pedimos que en esto no se lancen hipótesis, presunciones, que puedan afectar a personas que no tengan nada que ver con lo que se está investigando”, destacó Galilea.
Verse involucrados de esta manera en el caso Hermosilla no estaba en los planes de Chile Vamos. Con el inicio de las campañas para las elecciones de octubre, la estrategia en la derecha es desmarcarse de los coletazos de la investigación y reducir el costo político que puede significarles.
Así lo expuso el analista e investigador del Instituto de Estudios de la Sociedad (IES), Rodrigo Pérez de Arce, en conversación con Radio y Diario Universidad de Chile. “A nivel general la derecha ha reaccionado tomando distancia del caso, estableciendo una especie de dique de contención”, evaluó.
No obstante, también apuntó a la intervención de autoridades de Gobierno como la razón que explica el silencio de las colectividades. A su juicio, desviaron el foco mediático a la disputa entre Hermosilla y el Ejecutivo. “El propio Gobierno transforma este caso en algo distinto a un caso judicial, termina transformando esto en una discusión entre el Gobierno y Hermosilla, a pesar de que creo que en sentido jurídico no lo es”, expresó.
“Eso explica el silencio más general de los partidos. Es un tema incómodo, que ciertamente puede generar daño de cara a la campaña municipal”, prosiguió en su análisis Rodrigo Pérez de Arce.
En tanto, el analista político señaló que de encontrarse pruebas de que existen delitos cometidos por personeros de derecha asociados al caso Hermosilla, “particularmente de una persona que ha sido muy importante para ese sector como lo es Andrés Chadwick”, efectivamente tal escenario podría repercutir en los resultado de las elecciones municipales.
