Fueron muchas las estrellas que desfilaron por la Plaza de la Concordia durante la inauguración de los Juegos Paralímpicos , pero París dedicó una de sus más sonoras ovaciones al inglés John McFall , el primer atleta de deportes adaptado que irá al espacio, por increíble que parezca. El anglosajón, cuando solo tenía 19 años, se encontraba de viaje en el sudeste asiático cuando un accidente de moto le hizo perder una pierna. Duro bache que McFall normalizó en tiempo récord, pues se licenció en medicina, ahora cirujano, mientras iniciaba una inesperada y brillante carrera deportiva. Tras debutar en 2004, fue bronce en Pekín 2008 los cien metros lisos. Hito que superará en los próximos meses, después de que la Agencia Espacial Europea le haya autorizado a viajar a la Estación Espacial Internacional como primer astronauta con una discapacidad de la historia. «Es un verdadero honor para mí estar aquí hoy, como deportista paralímpico y miembro de la reserva de astronautas con discapacidad física. Me gusta pensar que mi presencia en la ceremonia de este año, en mi nuevo rol en la Agencia Espacial Europea , da fe y encarna el éxito, el alcance y el legado del movimiento Paralímpico. Con cada nuevo paso de mi viaje, me siento orgulloso de desafiar las ideas preconcebidas sobre los roles profesionales en los que deberíamos esperar ver a las personas con discapacidades físicas. Estoy comprometido a desempeñar mi papel para sentar las bases de un futuro diverso, inclusivo y lleno de oportunidades para todos«, aseguró el británico de 43 años antes de entregar la bandera paralímpica.