¿Sabías que un físico peruano, egresado de la Universidad Nacional de Ingeniería (UNI), ha llevado su pasión por la ciencia a nivel internacional? Este destacado profesional completó sus estudios de posgrado en prestigiosas universidades de Argentina y Francia, con el objetivo de ampliar aún más sus conocimientos y contribuir al avance de la física.
Su trayectoria no solo subraya la calidad educativa de la UNI, sino también el compromiso de los científicos peruanos por seguir formándose en centros académicos de renombre mundial.
Juan Carlos Rojas Sánchez, físico peruano originario de Chepén y licenciado por la Universidad Nacional de Ingeniería (UNI), se ha consolidado como una figura destacada en el ámbito científico internacional. Realizó sus estudios de maestría y doctorado en una universidad de Argentina, y culminó su grado de posdoctorado en Francia.
Actualmente, es investigador en el prestigioso Centro Nacional de Investigaciones Científicas (CNRS) en el Instituto Jean Lamour, uno de los más importantes de Francia y reconocido entre los mejores del mundo. Además, es docente del doctorado en dicha casa de estudios. Su trabajo en este centro de excelencia refleja el alto nivel de preparación y dedicación que caracteriza a los científicos peruanos en el exterior.
En una entrevista con el profesor Modesto Montoya, el físico Juan Carlos Rojas Sánchez mencionó las palabras de un profesor en su primer año en la UNI en 1994: "En el Perú, las universidades estafan a sus estudiantes, incluyendo parcialmente a la UNI, y en la UNI también parcialmente los estafamos". Explicó que no se trataba de un engaño directo, sino de una deficiencia en el sistema educativo.
"Al egresar, uno, como se dice a veces, termina 'pateando latas'. Nos pasaba mucho en ciencias básicas o en ingeniería. No desarrollamos la ingeniería como en los países desarrollados, industrializados. No hacemos diseños de circuitos celulares o de satélites de telecomunicaciones", señaló, destacando la brecha tecnológica con las naciones avanzadas.
"Eso fue lo que dijo mi profesor. Pero yo creo que hemos progresado mucho", comentó Juan Carlos Rojas Sánchez con optimismo. Cada vez que regresa a Perú, se siente alentado al ver cómo sus antiguos profesores están contentos con laboratorios mejor equipados y nuevos pabellones en las universidades.
"He visitado la UNI, he visitado San Marcos, y sí, veo un avance significativo", señaló, subrayando el progreso que han experimentado estas instituciones a lo largo de los años.
Nacido en Chepén, La Libertad, recuerda con cariño su infancia, marcada por el afecto de sus abuelos. En 1987, a los 12 años, su vida cambió drásticamente cuando su familia se mudó a Lima tras conseguir su padre un trabajo como mecánico.
Al principio, vivieron en la casa de una tía en el Rímac, un espacio estrecho para los seis miembros de la familia. "No quería mudarme a Lima, quería seguir en mi pueblo", recuerda con nostalgia en una entrevista con Andina. Luego, se trasladaron a San Juan de Lurigancho, donde construyeron una humilde casa de esteras y edificaron sus sueños sobre sus carencias.
El ingeniero destacado en Francia conoció la Universidad Nacional de Ingeniería (UNI) durante sus años escolares, gracias a sus profesores y compañeros. El rigor académico de la UNI lo atrajo de inmediato, y tras prepararse durante casi medio año, logró ingresar en 1994.
"Estoy agradecido con la UNI por toda la enseñanza que me brindó, así como con mis profesores y compañeros", expresó para Andina, recordando que en 1999 obtuvo su bachillerato en Física.
Con la firme intención de cambiar su rumbo, Juan Carlos Rojas Sánchez aplicó a una maestría en Física en el Instituto Balseiro, en Bariloche, Argentina, y fue becado, cubriendo casi todos sus gastos. Fascinado por las oportunidades, decidió seguir con un doctorado en la misma institución, esta vez se fue acompañado de su esposa e hijo. Este paso marcó el inicio de su carrera científica en el extranjero.
El egresado de la UNI continuó su formación en Francia, dado que fue aceptado en el Centro Nacional para la Investigación Científica CNRS/Thales para su posdoctorado, donde superó el desafío del idioma con determinación.
Desde 2015, es investigador permanente en el grupo de Espintrónica y Nanomagnetismo del Instituto Jean Lamour (IJL) en Nancy, y en 2018 fue nombrado director del Centro de Competencia de Micro y Nanotecnologías del IJL, MiNaLor.
Además, ha obtenido una medalla de bronce en la ceremonia de Talentos del CNRS. "A veces no me doy cuenta de lo que voy logrando, y tal vez está bien para mantener la humildad", reflexionó sobre su trayectoria.
