El Sevilla sumó en Son Moix este martes su segundo punto de la temporada tras empatar en la tercera jornada ante el Mallorca (0-0) . Ambos clubes contaron con ocasiones de gol durante los 90 minutos, pero se mostraron incapaces de mover el marcador inicial. En el tramo final del partido, cuando los locales más apretaban para hacerse con la victoria, el Sevilla se quedó con un futbolista menos por la expulsión de Saúl Ñíguez. El centrocampista ilicitano, llegado este verano al club nervionense cedido desde el Atlético de Madrid, vio la cartulina roja directa tras cometer una falta. Inicialmente el árbitro del encuentro, Muñiz Ruiz , únicamente sancionó la disputa entre los jugadores, pero instantes después decidiría expulsar al sevillista por sus protestas. «Por lo que me han comentado, creo que ha dicho que 'eres muy malo' o que estaba haciendo un mal arbitraje . No creo que sea para sacarle roja por eso», comentaba Gudelj tras el partido a pie de campo. En el acta Muñiz Ruiz explicó la decisión de mostrarle la tarjeta roja de la siguiente forma: «por dirigirse a mí a voz en grito en los siguientes términos: 'eres malísimo'» . Saúl será por lo tanto baja, como mínimo, para el partido del pasado domingo ante el Girona. Conviene recordar que desde esta temporada sólo el capitán del equipo está capacitado para dirigirse al árbitro . No obstante, durante las primeras jornadas varios jugadores han recibido tarjeta amarilla por este motivo, pero nunca la roja. Con esta expulsión, el centrocampista del Sevilla se enfrenta a una sanción de dos partidos , con lo que se perdería los próximos duelos de Liga frente al Girona en Nervión y, en la siguiente jornada, contra el Getafe también en casa.