La Contraloría General alertó a la Policía Nacional del Perú (PNP) que 314 oficiales que pasaron a situación de retiro entre el 2015-2024, tienen posesión de las armas de fuego y el equipo policial del Estado que les fue asignado para cumplir con el servicio policial.
A través del Órgano de Control Institucional de la Policía Nacional del Perú (OCI de la PNP), la Contraloría indicó que los oficiales debieron devolver estas armas y los equipos policiales dentro de los 60 días calendario de haber sido notificados de que pasaban al retiro, conforme lo establece una directiva interna; sin embargo, no lo han hecho.
Este 2024, 40 exoficiales, que ya no se encuentran en actividad, mantienen en su poder estos bienes del Estado. Según la Contraloría, esta situación pondría en riesgo el destino y la posesión final de estos por no cumplir con la devolución en los plazos establecidos.
De acuerdo con el Informe de Visita de Control N.º 048-2024-OCI/3792-SVC, se encuentra relación de los 314 exoficiales; además, las armas de fuego y el equipo policial que no han sido entregados al Estado, entre ellos, pistolas marca: Sig Sauer (91), Pietro Beretta (76) y Star (43), así como revólveres marca Smith Wesson (31); además de 71 grilletes (esposas) Smith Wesson, entre otros bienes.
Según la Contraloría, la PNP no ha notificado a los oficiales en retiro. En febrero de este año, la Policía inició las acciones para notificar a los oficiales en retiro que adeudan bienes, pero estas no llegaron a concretarse por la falta de personal,
En abril, se pretendió contratar a una notaría para que notifique. Al 22 de julio del 2024, que se emitió el informe, los involucrados no habían sido notificados.
En otro informe del OCI de la PNP se advierte que 119 oficiales en retiro no han efectuado la devolución de vehículos de seguridad de propiedad del Estado que le fueron asignados en la última década. Estas unidades están valorizadas en casi S/2 millones.
De acuerdo con el Informe de Visita de Control N.º 046-2024-OCI/3792-SVC, en noviembre del 2023, se enviaron cartas notariales a 78 de los 119 oficiales en retiro para que devuelvan los vehículos en un plazo de 72 horas.
No obstante, 35 oficiales han muerto y sus parientes tampoco los han retornado al Estado. Solo 7 oficiales que pasaron a situación de retiro durante el 2024 devolvieran los vehículos de seguridad asignados.
Asimismo, señalan que, de acuerdo a la normativa, los vehículos de seguridad asignados a oficiales, generales y coroneles deben ser devueltos en buen estado a la División de Logística de la Dirección de Administración de la PNP en un plazo máximo de 7 días calendario después de pasar al retiro.
También tienen la opción de comprar el vehículo, a través de un escrito en un plazo de 30 días calendario. En este caso, los oficiales en situación de retiro no devolvieron los vehículos ni manifestaron su decisión de comprarlos en la última década (2014-2023).
Al igual que en el caso de las armas y equipos policiales, tampoco se ha informado a la Procuraduría Pública a cargo de los asuntos jurídicos del Ministerio del Interior para que formule la denuncia respectiva a los deudores.
Según consta en los informes, OCI de la PNP ha comunicado al comandante general de la PNP, Víctor Zanabria Angulo, los resultados de la comisión de control a fin de que la entidad adopte las acciones que permitan mitigar los riesgos identificados. Sin embargo, manifiestan que, hasta la fecha, no ha recibido respuesta.
Contraloría alerta ausencia de sistemas informáticos en PNP para control de devolución de bienes: Usan registros manuales y Excel.
La Contraloría indicó que la comisión de control dio cuenta que la PNP solo utiliza registros manuales y hojas de cálculo en el Excel para el control y seguimiento del universo de armas de fuego y vehículos de seguridad asignados al personal policial.
En ese sentido, alertó la ausencia de sistemas informáticos interconectados, entre las diferentes direcciones policiales, para el control y seguimiento del ingreso y salidas de armas de fuego afectadas al personal policial, y la entrega y devolución de los vehículos de seguridad asignados a oficiales en el servicio activo.
"Esto pone en riesgo la información, control y seguimiento tanto de las armas y equipos policiales, así como del parque automotor de la PNP", dijo la Controlaría.