La accesibilidad digital se convierte en una prioridad para la industria financiera en la Argentina. Bancos y fintechs buscan garantizar que sus plataformas sean inclusivas y puedan ser utilizadas por todos los usuarios, no importa cuáles sean sus capacidades.
En un mundo más digitalizado, la accesibilidad en aplicaciones y sitios web financieros se ha vuelto crucial, no solo para cumplir regulaciones, sino para asegurar que cada vez más personas puedan acceder a los servicios bancarios y fintech.
En la Argentina, plataformas como Mercado Pago y MODO impulsan el cambio hacia un entorno digital más accesible.
Susana Pallero, reconocida experta en accesibilidad digital y directora de la Fundación Itgrarte, subraya la necesidad de que las empresas adopten estándares internacionales como las WCAG (Pautas de Accesibilidad para el Contenido Web).
Según Pallero, "la accesibilidad digital es un derecho fundamental y no debe verse como un mero cumplimiento normativo, sino como una herramienta para lograr una verdadera inclusión". Esto es de especial relevancia en un país donde el acceso a servicios financieros puede ser un desafío para personas con discapacidades.
Mercado Pago implementó un enfoque de diseño inclusivo que abarca desde el diagnóstico hasta la ejecución. (Imagen: archivo)
Mercado Pago tomó medidas en este sentido. La compañía implementó un enfoque de diseño inclusivo que abarca desde el diagnóstico hasta la ejecución, asegurando que sus plataformas sean compatibles con tecnologías de asistencia como lectores de pantalla y teclados especiales.
"Nuestro objetivo es eliminar las barreras para que todas las personas tengan igualdad de oportunidades al utilizar nuestras herramientas", comenta un portavoz de la empresa. Además, el uso de aplicaciones fintech en la Argentina ha crecido más de un 100% en el último año, con 163 millones de transacciones a través de celulares, lo que subraya la importancia de hacer estas plataformas accesibles para todos.
Federico Barallobre, responsable de marketing en MODO, detalla cómo la plataforma ha tenido que adaptarse para cumplir con normativas de accesibilidad impuestas por el Banco Central. "Cuando lanzamos MODO, no teníamos una billetera accesible, pero reconocimos la necesidad de cambiar para incluir a todos los usuarios, especialmente aquellos con dificultades visuales", explica Barallobre.
Esta transformación no solo implicó ajustes en la interfaz de usuario, sino también en la identidad visual de la marca, lo que permitió a MODO ofrecer una experiencia más inclusiva y accesible para todos.
En MODO reconocen que la accesibilidad no es solo una ventaja competitiva, sino una responsabilidad social. (Imagen: archivo)
"Para el proyecto de accesibilidad no solo ajustamos el 'verde MODO', sino que también lo hicimos con los tamaños de textos y toda nuestra paleta. Analizamos todos los 35 colores que usamos en todos los 1670 componentes de interfaz del usuario del sistema de diseño y en la App para validar que en todos los casos pasara los requerimientos de la WAG para Contraste mínimo, Level AA", explica Barallobre.
"Así, logramos que todos los componentes y elementos de UI tengan la relación correcta de contraste, exceptuando los elementos decorativos o de refuerzo como, íconos, ilustraciones, logotipos, etcétera. Cumplimos las WCAG que establecen los requisitos para que los sitios web, las aplicaciones y otros contenidos digitales sean accesibles para las personas con discapacidades", cierra.
Aunque MODO ha hecho avances, sigue enfrentando desafíos en un mercado dominado por competidores como Mercado Pago, que también hacen esfuerzos para mejorar la accesibilidad. La competencia entre estas plataformas es constante, pero tanto Mercado Pago como MODO reconocen que la accesibilidad no es solo una ventaja competitiva, sino una responsabilidad social.
La accesibilidad digital no es un objetivo estático, sino uno en evolución. Las empresas financieras están comenzando a reconocer la importancia de este aspecto, no solo como una obligación regulatoria, sino como una oportunidad para mejorar la experiencia del usuario y atraer público.
La accesibilidad no sólo debe verse como una obligación regulatoria, sino como una oportunidad para mejorar la experiencia del usuario y atraer público. (Imagen: archivo)
Sin embargo, como señalan los expertos, aún queda un largo camino por recorrer. "Es fundamental que las empresas mantengan la accesibilidad como una prioridad en su agenda, adaptándose a las necesidades cambiantes de sus usuarios", concluye Pallero.
En un contexto donde la inclusión digital es clave para el desarrollo de una sociedad más equitativa, los esfuerzos de bancos y fintech para mejorar la accesibilidad son un paso en la dirección correcta, pero es necesario que estos esfuerzos se mantengan y se amplíen para que nadie quede fuera del sistema financiero digital.
