Tras la crisis poselectoral en Venezuela , muchos países exigieron al Gobierno venezolano mostrar las actas que debían respaldar los resultados por el oficialismo. México, sin embargo, evitó tomar partido y pidió paciencia . El presidente Andrés Manuel López Obrador había asegurado que esperaría a que el Tribunal Supremo de Justicia (TSJ) venezolano «certificara» la victoria de Maduro y despejara todas las dudas, aunque esa tarea sólo compete al Consejo Nacional Electoral (CNE). El jueves, sin embargo, el Supremo «convalidó» el triunfo chavista, pero López Obrador evitó reconocer la victoria de Nicolás Maduro. «Vamos a esperar a que se den a conocer las actas, porque al parecer resuelve el Tribunal y le pide al Consejo Electoral que den a conocer las actas», apuntó ayer durante su rueda de prensa diaria. No obstante, el TSJ presidido por la chavista Caryslia Rodríguez exhortó al CNE a publicar los resultados, no las actas de escrutinio. Algunas naciones de la región se han pronunciado con mayor claridad . Este viernes los gobiernos de Argentina, Costa Rica, Chile, Ecuador, EE.UU., Guatemala, Panamá, Paraguay, Perú, República Dominicana y Uruguay emitieron una declaración conjunta rechazando el fallo del TSJ por «falta de independencia e imparcialidad». Pero, de momento, ni Gustavo Petro y ni Luis Inácio Lula da Silva , presidentes de Colombia y Brasil, han reaccionado a los acontecimientos venezolanos. Europa tampoco reconocerá el cuestionado triunfo de Maduro. El Alto Representante de la UE para Política Exterior, Josep Borrell, dijo ayer que «mientras los resultados no sean verificables, no va a haber reconocimiento de los mismos». También anunció que está trabajando para que los 27 fijen una posición en este sentido, «si no ahora, para el próximo Consejo de Ministros Exteriores para la próxima semana». Por otra parte, el Gobierno venezolano agradeció este viernes a los presidentes de Cuba y Nicaragua, Miguel Díaz-Canel y Daniel Ortega , por respaldar la victoria de Maduro.