La Policía Nacional ha detenido en la madrugada de este lunes a tres varones como presuntos autores de un delito de estafa y otro de pertenencia a grupo criminal, en concreto por hacerse con casi 20.000 euros tras manipular la ruleta de una máquina de juegos. Agentes de la Brigada Provincial de Seguridad Ciudadana -radiopatrullas- fueron requeridos para que acudiesen a una sala de juegos alertados por la encargada, que observó que la ruleta de la máquina de juegos había sido manipulada. La trabajadora intentó en varias ocasiones acercarse a la máquina, pero en todas ellas era distraída con conversaciones, hecho que, junto con el elevado montante de premios que estaban consiguiendo, que excedía lo normal, le hizo sospechar. Los detenidos, que abandonaron el local antes de que llegasen las dotaciones policiales, fueron identificados por los trabajadores por medio del protocolo que regula este tipo de establecimientos. Las gestiones de investigación lograron evidencias de la manipulación de la máquina , habiendo acudido al establecimiento días antes, por lo que los agentes iniciaron la búsqueda de los varones y lograron localizar a los individuos en un hotel de la capital, donde se les intervino instrumental para la manipular la ruleta, 14.700 euros en efectivo y un juego de llaves de un coche, entre otros efectos como varios boletos de diferentes apuestas y sorteos. Su vehículo fue localizado en las inmediaciones. En el interior del maletero se intervinieron varillas metálicas, un taladro portátil, un alicate y otra gorra, procediendo al trasladando del vehículo a dependencias policiales. El 'modus operandi' llevado a cabo por este grupo criminal itinerante y bien estructurado consistía en que uno de los miembros realizase funciones de vigilancia mientras los otros dos realizaban con el taladro en la cubierta de metacrilato de la ruleta un agujero por donde introducían una varilla de metal para hacer parar la bola en el rango de números a los cuales previamente habían realizado apuestas múltiples. Los detenidos fueron puestos a disposición del Juzgado de Instrucción en funciones de Guardia de Valladolid, que decretó su libertad con cargos.