Una bomba de la Segunda Guerra Mundial, equipada con un mecanismo de retardo, fue descubierta en una planta petroquímica en la República Checa, provocando su cierre y la implementación de un perímetro de seguridad, anunció la policía checa el jueves.
La bomba británica de 250 kilogramos fue encontrada por los trabajadores el miércoles en Zaluzi, a unos 100 kilómetros al noroeste de Praga.
La planta, controlada por el gigante petrolero polaco Orlen, tuvo que cerrar su sección de refinación de petróleo "hasta nuevo aviso", según un comunicado de la empresa.
La policía ordenó la evacuación de 600 personas, así como la instauración de un perímetro de seguridad de un kilómetro cuadrado y medio.
"El peligro y la rareza de este hallazgo radican en el mecanismo de detonación", explicó la policía checa en un comunicado, precisando que se trata de un mecanismo químico de retardo "que puede ser ajustado para una duración de hasta 144 horas, es decir, seis días".
Los expertos checos en explosivos también están consultando con "colegas de Alemania, que tienen más experiencia" en relación con tales bombas, según el comunicado.
Durante la ocupación alemana la planta petroquímica contribuía al esfuerzo de guerra nazi y fue objetivo de bombardeos aliados en 1944.