Se acaban las vacaciones de verano y toca volver a la oficina. Y por mucho que nos guste nuestro trabajo, vamos a ser sinceros: nos gusta más estar de vacaciones. Las frases motivacionales del estilo "trabaja en lo que te gusta y nunca notarás que estás trabajando", suena muy bien estampado en una taza, pero en la realidad, existen los madrugones, los parones en el tren, los atascos en la carretera y un sinfín de factores que no sufrimos cuando estamos en una tumbona en la playa, con vistas al mar y un mojito en la mano. Y es que parece un poco utópico eso de que podemos diseñar nuestra vida a nuestro gusto y cambiar aquello que no nos hace felices, pero tiene su parte de verdad. Nunca es tarde para ser feliz. La psiquiatra Marián Rojas nos da seis consejos para recuperar esa motivación que nos hace capaces de todo, desde una perspectiva científica: aumentando nuestra dopamina.
Si volver a trabajar te da pereza, es totalmente normal, pero si eso te supone un verdadero trauma, lo mismo hay algo que debes cambiar: tu mentalidad. Lo cierto es que hay cosas que se pueden modificar (trabajo, ciudad...), pero hay otras que forman parte de la rutina y que no siempre se pueden evitar. Ahí entra en juego tu capacidad para tomártelas y enfrentarte a ellas. Por este motivo, vamos a hacer un cambio de chip y volver a la oficina con las energías recargadas y con otra perspectiva de las cosas. Para ello vamos a potenciar nuestras 'ganas de vivir' de la forma más científica y biológica que hay: generando dopamina.
"Soy consciente de que, con los conocimientos que tenemos en la actualidad, no podemos controlar al 100% cuánta dopamina liberamos en diferentes momentos del día. Lo que sí sabemos con seguridad es que hay ciertos consumos, conductas y actitudes que pueden estimular su producción. Por eso es importante que seamos capaces de enfocarnos en actividades más sanas y saludables que lo fomenten", explica la psiquiatra Marián Rojas en su Instagram.
1. Desconectar del mundo digital: sabemos que en el trabajo es complicado, pero al acabar tu jornada, puedes dejar el móvil de lado y realizar tu propia dosis de desconexión digital. vivir la vida real, en vez de esa vida virtual que nos ofrecen las redes sociales. La dopamina es un neurotransmisor clave en el sistema de recompensa del cerebro, y su liberación está asociada con el placer, la motivación y la [[LINK:TAG|||tag|||6336187359a61a391e0a1478|||sensación de bienestar]]. La constante exposición a estímulos digitales (notificaciones, redes sociales, correos) puede aumentar los niveles de estrés y ansiedad, lo cual, a su vez, puede afectar negativamente los niveles de dopamina.
2. Duchas de agua fría: tomar duchas de agua fría puede incrementar la liberación de dopamina, lo que contribuye a un mejor estado de ánimo, mayor energía y resiliencia al estrés. Sin embargo, es importante tener en cuenta que la tolerancia y los efectos pueden variar entre individuos. Cada cuerpo es un mundo y tiene sus propias afecciones y necesidades. Además, en lo que a salud de la piel se refiere, los dermatólogos recomiendan ducharse con agua templada, a una temperatura similar a la del cuerpo, es decir, entre 36 y 37 grados, para proteger la piel. Sin embargo, una ducha fría de vez en cuando, si te viene bien, no está mal. Apuesta por una buena crema hidratante corporal después de la ducha. Y listo.
3. Aprender algo nuevo que motive: la rutina del día a día, el trabajo y el ritmo de vida, puede resultar monótono, pero hay pequeñas cosas que se pueden cambiar. Apúntate a ese curso de cocina que nunca tienes tiempo de hacer, conoce gente nueva o cambia de barrio al dar esos paseos por la tarde.
4. El ayuno: los niveles de insulina disminuyen durante el ayuno, lo que puede mejorar la sensibilidad de los receptores de dopamina. Esto significa que el cerebro puede responder de manera más efectiva a la dopamina disponible, lo que puede mejorar el estado de ánimo, la motivación y el enfoque. El ayuno intermitente hay que hacerlo con cabeza y siempre bajo la supervisión de un especialista.
5. Iniciar un proyecto: lo tienes en la cabeza, pero nunca te atreves. Hazlo. Nunca va a ser un buen momento, hasta que no empieces.
6. Hacer deporte: sabías que iba a estar en esta lista, ¿verdad? El ejercicio es fundamental y puedes practicar deporte en casa, si no tienes tiempo de ir al gimnasio. Busca una actividad que te guste, para hacerlo con ganas y no por obligación. Di adiós a la pereza, tu cuerpo y tu mente te lo agradecerán.