La Policía francesa disparó y hirió gravemente a un hombre este miércoles después de que este prendiera fuego al ayuntamiento de la ciudad de Angouleme, en el oeste de Francia , según informaron las autoridades locales y fuentes policiales. El hombre, de 46 años, que vestía un uniforme militar, irrumpió en el edificio del siglo XIX y vertió gasolina en una habitación del primer piso donde trabajaban dos ayudantes de concejales locales. «Vertió gasolina en la habitación, pero las ayudantes lograron salir y pedir ayuda, alertando a la Policía local», ha declarado el prefecto Jerome Harnois, en una conferencia de prensa. Los agentes recurrieron a «utilizar sus armas de fuego varias veces» después de no poder reducir al atacante con una porra, ha señalado Harnois. Una fuente policial ha manifestado además que el hombre, un ciudadano francés, ha sido trasladado al hospital «en estado muy grave » y que no tenía antecedentes penales. Por el momento se desconocen los motivos del ataque. El alcalde de Angulema, Xavier Bonnefont, ha comunicado que el fuego fue sofocado rápidamente, mientras que el ministro del Interior, Gerald Darmanin, ha publcado en su cuenta de X que «nadie resultó herido aparte del autor». « No parece haber ninguna disputa » entre el hombre y los trabajadores municipales en la ciudad de unos 40.000 habitantes, ha indicado el alcalde Bonnefont. Un equipo de desactivación de bombas revisó el automóvil del atacante fuera del ayuntamiento y la Policía registró su casa en un barrio residencial de Angulema. Una vecina ha manifestado al periódico local 'Charente Libre' que el hombre se había afeitado recientemente la cabeza y « no era el mismo de siempre » cuando lo vio este miércoles por la mañana. «Estaba enfadado, bajó las escaleras como un loco (llevando) dos botes de pintura en aerosol», ha explicado.
