Los pueblos de la dehesa extremeña, ese territorio medio desconocido para muchos españoles al sur de la provincia de Badajoz, riegan con mangueras de agua a los ciclistas cuando pasan por sus calles. Son 40 grados al mediodía, horario de fuego en la España de las carreteras secundarias, y los corredores acusan ese ahogo que necesita líquido y refrigeración. Funciona la escapada de todos los días, un Euskaltel y un Kern Pharma, los dos equipos invitados a la Vuelta a España que se ganan el sueldo. Ibon Ruiz ya lleva 440 kilómetros en fuga en cinco etapas . Pero es también el aburrimiento, otra etapa tediosa de escapada consentida y resolución al esprint después de varias horas de trabajo y retraso en el horario previsto. Hay poco que contar más allá de la caída a la entrada de Sevilla que retira al campeón del mundo en 2013, el portugués Rui Costa, en aquella edición de lágrimas españolas en el podio con Purito Rodríguez que pudo ser oro y Alejandro Valverde que se equivocó en la táctica. El Alpecin trabaja para el esprint de Kaden Groves, que no es Jesper Philipsen, y en la 'volata' salta la sorpresa. Acelera por la izquierda Van Aert , el ciclista total que da prestigio a la ronda, pero le remonta casi en foto finish el checo Pavel Bittner.