El Ayuntamiento de Torremolinos (Málaga) ha cerrado al público los nichos y el osario del cementerio para solventar un problema de salubridad originado por un fallo en el hermetismo de uno de los ataúdes depositados en el camposanto. Según han confirmado a ABC fuentes municipales, el pasado día 2 de agosto se detecto una fuga de fluidos que emanaba desde uno de los nichos y que se fue extendiendo hasta llegar al suelo, por lo que el día 6 se procedió a clausurar esta parte de las instalaciones. El Consistorio ha informado en un comunicado que ha sido necesario aislar dicho nicho para llevar a cabo actuaciones en materia de limpieza y aislamiento por parte de los operarios municipales. La previsión es que estos espacios volverán a abrir el próximo 12 de agosto . Mientras tanto, las salas de velatorio y el resto de dependencias del cementerio permanecen abiertas.
