El Gobierno nacional anunció que, a partir de septiembre, la Ciudad de Buenos Aires y la provincia de Buenos Aires no recibirán ninguna ayuda económica para las líneas que sólo hacen el recorrido en sus distritos.
Esta medida, que busca reorganizar la distribución de ayudas estatales en el servicio público de transporte, tendrá un impacto en los costos operativos y, posiblemente, en el precio del boleto para los usuarios.
La Secretaría de Transporte de la Nación, administrada por Franco Mogetta, comunicó que la eliminación de estos subsidios forma parte de un proyecto más amplio de ordenamiento y eficiencia en el uso de los recursos destinados al transporte.
"Nos estamos ocupando de eficientizar estos indicadores, ya que creemos que las empresas tienen que tener una mayor autonomía del Estado, sobre todo las líneas de colectivos que son privadas, y deben manejar con mayor libertad sus ingresos, y no estar condicionados por el subsidio que paga el Estado", puntualizó.
Según datos oficiales, la reducción de estos subsidios en CABA permitirá un ahorro mensual estimado en $7000 millones para el Estado. Las 31 líneas afectadas por esta medida en CABA son las siguientes:
En la provincia de Buenos Aires, las líneas de colectivos que operan exclusivamente dentro de esta jurisdicción ya reciben sus compensaciones del gobierno provincial, por lo que la única modificación será la eliminación del financiamiento nacional al programa Red SUBE.
Este cambio generará un ahorro adicional estimado en $6500 millones para el Estado Nacional.
Por otro lado, en el Área Metropolitana de Buenos Aires (AMBA), que incluye tanto a CABA como a partes de la provincia de Buenos Aires, el Estado Nacional continuará subsidiando 103 líneas de colectivos, lo que asegura la continuidad del programa Red SUBE para estas líneas.
Luciano Fusaro, presidente de la Asociación Argentina de Empresarios del Transporte Automotor (AAETA), habló de una "gran incertidumbre" en el sector ante los últimos anuncios y aseguró que el mes de septiembre podría comenzar sin servicio de colectivos en el AMBA.
"Toda esta situación genera una incertidumbre bastante grande, primero se anunció un aumento de tarifa a partir del próximo lunes y por otro lado apareció esta noticia con la quita de subsidios de 31 líneas la Ciudad, que dice que no es su competencia. Si ninguna de las dos partes aporta los subsidios, es inviable la continuidad del sistema con la nueva tarifa que se anunció para este lunes", recalcó Fusaro en diálogo con El Destape Radio.
"A principio de septiembre debería multiplicarse por cuatro el sistema tarifario para que los colectivos puedan seguir funcionando como hasta hoy. El boleto mínimo debería pasar a $ 1080. En las reuniones con el Gobierno nunca se habló de un salto tan abrupto, pero tampoco se había hablado de una quita de subsidio. Si esto no se resuelve, los colectivos no van a funcionar", afirmó Fusaro, quien instó a las autoridades a brindar "definiciones más precisas".
