Venezuela celebró sus elecciones presidenciales el pasado 28 de julio de 2024. Pese a las trabas y complicaciones impulsadas por el gobierno chavista, el pueblo venezolano acudió masivamente a ejercer su derecho al voto en unos comicios que los pusieron en el ojo del mundo. Sin embargo, los resultados distaron de reflejar las expectativas de la ciudadanía venezolana. El Consejo Nacional Electoral adjudicó la victoria a Nicolás Maduro, con el 51,95 %, sobre el 43,18 % de Edmundo González.
Este resultado llevó a la oposición y a una gran parte de la ciudadanía a acusar al ente electoral de promulgar un fraude sobre los resultados reales de las elecciones. La acusación ha tenido eco en la comunidad internacional y ha despertado la represiva respuesta del gobierno madurista. Ahora, una de las comisiones de observación del proceso electoral, el Centro Carter, ha hecho públicas sus conclusiones y ha confirmado las denuncias de la oposición.
Jennie Lincoln, jefa de la misión de observación del Centro Carter, detalló sus primeras conclusiones sobre el proceso electoral venezolano en el que el ente participó como observador. "A pesar de que el terreno de juego era muy desigual, el pueblo venezolano fue a votar. La gran irregularidad de la jornada electoral fue la falta de transparencia del CNE y la flagrante inobservancia de sus reglas de juego en cuanto a mostrar el verdadero voto del pueblo", resaltó la especialista en conversación con AFP.
La asesora del organismo internacional para Latinoamérica y el Caribe indicó que el Centro Cartel ha "analizado los números" disponibles en coordinación con otras organizaciones y universidades y "confirma a Edmundo González Urrutia como el ganador con más del 60%" de los votos.
La oposición ha publicado en un sitio web copias de más del 80% de las actas, afirmando que estas prueban el triunfo de González Urrutia, con un 67% de los votos. Sin embargo, el Consejo Nacional Electoral (CNE) le otorgó un 43%, mientras que a Maduro le asignó un 52%. Por su parte, el chavismo desestima la validez de estos documentos y asegura que son forjados. Unos alegatos a los que Lincoln respondió con un contundente es: “es puro teatro”.
La representante del Centro Carter desestimo la versión del gobierno chavista sobre un jaqueo a su sistema electoral. "Empresas monitorean y saben cuando hay denegaciones de servicio (jaqueos) y no hubo una esa noche", señaló desde Atlanta, Estados Unidos. "La transmisión de la data de votación es por línea telefónica y teléfono satelital y no por computadora. No han perdido data", añadió.
A su vez, recordó que Elvis Amoroso, presidente del CNE, "dijo que publicaría los resultados mesa por mesa en la página web y entregaría un CD a los partidos políticos" al momento de anunciar el primer boletín. "Es una promesa que nunca cumplió", especificó la especialista.
Dentro de la comunidad internacional, los países de Colombia, Brasil y México vienen impulsando la idea de una "verificación imparcial de los resultados". Ante ello, Jennie Lincoln desconfía de las posibilidades del Centro Carter en una auditoria de esta envergadura. "Soy incrédula, escéptica sobre lo que un equipo de verificación internacional podría hacer que no hayan hecho los testigos, que han producido las verdaderas actas de la noche", estimó.