La Policía Nacional ha desmantelado al clan de las bosnias, una nueva generación de carteristas (aunque algunas de ellas llevaban asentadas en Madrid una década) que estaba considerada la más activa de España. Varios pisos okupas de Carabanchel eran su guarida. Más allá de los 17 detenidos (entre ladronas y sus jefes), la importancia añadida de la operación radica en que ha quedado demostrado el entramado económico y de trata de personas que escondía esta organización. De hecho, están involucrados la Fiscalía Anticorrupción y de Crimen Organizado y el Juzgado Central de Instrucción número 6 de la Audiencia Nacional. La operación Tavan (por la zona de Bosnia de donde proceden estas familias delictivas) comenzó hace cerca de dos años. Las pesquisas son obra de los investigadores en Delincuencia Ininerante de la UDEV Central, habida cuenta de la gran capacidad de movilidad geográfica de esta organización criminal. Las mujeres se dedicaban a robar por el método clásico, al descuido, bolsos y en bolsillos. Buscaban esencialmente dinero en efectivo y sus víctimas predilectas eran los turistas. De hecho, se les han incautado divisas como dólares, yuanes..... Quienes las manejaban son sus parientes masculinos, abuelos, padres y hermanos, de manera que cuando alguna de las rateras ya se hacía mayor para estas lides la 'jubilaban'; en otros casos, a otras que estuvieran muy 'quemadas' porque habían sido muchas veces detenidas en una zona concreta de España, las cambiaban de ciudad. Las detenciones se han practicado el 16 de julio en Carabanchel y varias localidades valencianas. «Se mudaban de manera recurrente para evitar la acción policial», especifican fuentes del caso. Son clanes muy herméticos, en cuya cúspide están los mayores, que controlan a los más jóvenes y a las hurteras, principalmente. El dinero que obtenían lo enviaban por empresas de mensajería a los países donde residen los patriarcas, como Italia, Francia, Croacia y, lógicamente, Bosnia. Es el conocido como pitufeo. Los agentes de la UDEV Central no han detectado que utilizaran a menores de edad, pero sospechan que podría haber sido así. Las mujeres (9 de los 17 detenidos) están entrenadas para robar. Las hay que llevaban diez años en España y una en concreto suma cerca de 200 antecedentes policiales; de ahí que algunas tuvieran pendiente órdenes judiciales de ingreso en prisión. En algunos casos, además, las traían de forma ilegal a nuestro país con la finalidad de someterlas y controlarlas, de ahí la imputación de trata de personas con finalidad delictiva. Su rutina era la misma cada día: salían de los pisos de manera sistemática a las 9 de la mañana; las acercaban en Metro, autobús e incluso en taxi hasta el centro de la ciudad, a las zonas más turísticas. De hecho, tenían cierta predilección por la ciudad de Sevilla, explican los agentes, no tanto por su indiscutible belleza como por las bullas que se montan en la Semana Santa, la Feria de Abril y Navidad. Eso sí, donde no 'trabajaban' era en el Metro de Madrid, habida cuenta de que hace años arrasaron en ese transporte, donde llegaron a acumular, las de su anterior generación, más de 300 reseñas policiales e incluso órdenes de alejamiento. En lo que no dudaban era en utilizar la violencia contra sus víctimas si oponían resistencia al hurto, lo que puede complicarles la condena. Es literalmente imposible saber a ciencia cierta cuántos delitos han cometido, también sus réditos obtenidos: «Son infinitos». Los investigadores apuestan a que son cientos los robos y que, al menos, se han apoderado de cientos de miles de euros, de los que ellas se quedaban muy poco. De hecho, vivían de una manera muy humilde, pese al dineral que afanaban, y no tenían actividad laboral conocida. Algunos de los encartados presentaban documentación falsa de identidades comunitarias (como croatas o italiano) y otros tenían permisos de residencia. La UDEV Central, en colaboración con la UDEF para la parte del posible blanqueo de capitales, explotó la operación el 16 de julio. Hubo que precipitar los arrestos porque esta mafia ya tenía preparada su salida hacia París, aprovechando la celebración de los Juegos Olímpicos, donde se querían poner las botas sisando a extranjeros y demás turistas. En los seis registros practicados se han hallado también rupias, pesos colombianos y coronas suecas. Hay 13 cuentas bancarias bloqueadas.
