El embajador de Estados Unidos en Tokio, Emanuel Rahm, y la Embajadora británica en el país asiático, Julia Longbottom, no participarán en la Ceremonia de la Paz en Nagasaki, después de que esta ciudad japonesa no invitara a Israel, confirmó a EFE un portavoz de la ciudad. Tanto Longbottom como Rahm participaron en la ceremonia de la Paz en Hiroshima el día 6, sin embargo, se perderán ahora el encuentro en Nagasaki el día 9, ya que esta ciudad, a diferencia de la primera, ha decidido no invitar a Israel al encuentro.
"La embajada de EE.UU. ha confirmado hoy que va a participar el cónsul en Fukuoka en representación del país", dijo el portavoz, que apuntó que, antes de los últimos cambios, un total de 101 países habían confirmado su participación.
El portavoz señaló que la no invitación de Israel "no se trata de una decisión política", sino "evitar una posible situación que impida la seguridad de los participantes y la celebración de una ceremonia pacifica", detalló.
Estos actos conmemoran el 79 aniversario del devastador ataque atómico sobre las dos ciudades japonesas, donde también se firma cada año de una Declaración de Paz que busca mandar un mensaje al mundo sobre la abolición de las armas nucleares.
"A diferencia de Rusia, que invadió Ucrania, y Bielorrusia, que cooperó en la invasión, Israel está ejerciendo su derecho a la legítima defensa. Por lo tanto, tratar a Israel de la misma manera sería engañoso" dijo Longbottom a los medios el día 6, en declaraciones recogidas por el diario japonés Mainichi. Estados Unidos ha tomado la misma decisión y enviará al encuentro a Chuka Asike, funcionario principal del Consulado de Estados Unidos en Fukuoka, según dijo hoy el consulado.
La decisión de ambos países se produce después de que Nagasaki dejara fuera de la ceremonia a Rusia, Bielorrusia e Israel. En el caso de este último, la alcaldía de la ciudad nipona indicó que la medida se había visto motivada por "el riesgo de incidentes inesperados durante la ceremonia" debido al conflicto en Oriente Medio.
Junto a Estados Unidos y el Reino Unido, Canadá, Francia, Alemania, Italia y la Unión Europea señalaron que "les sería difícil tener participación de alto nivel" en el acto de Nagaski si Israel fuera excluido del mismo, en una carta enviada por sus embajadores en Japón al alcalde de la ciudad el pasado 19 de julio y recogida hoy por los medios nipones.
"La decisión de invitar a esta ceremonia corresponde a Nagasaki, por lo que al Ejecutivo japonés no le corresponde comentar al respecto", dijo hoy el portavoz gubernamental japonés, Yoshimasa Hayashi, en una rueda de prensa.
Más de un centenar de representantes de distintas naciones participaron el martes en la ceremonia en esta ciudad del oeste de Japón, incluido el embajador de Israel, Gilad Cohen, quien acudió al evento y escuchó con semblante serio las palabras de su alcalde, Kazumi Matsui. Esta invitación fue criticada, ya que Hiroshima no invitó a Rusia o Bielorrusia en los últimos tres años por la invasión de Ucrania. Palestina tampoco fue invitada.
Hiroshima fue el objetivo de la primera bomba atómica empleada en combate de la historia, bautizada "Little Boy" y lanzada por este bombardero de las Fuerzas Aéreas estadounidenses. Tres días después del ataque sobre Hiroshima, el 9 de agosto de 1945, EE.UU. lanzó una segunda bomba nuclear sobre la ciudad de Nagasaki, lo que desembocó en la capitulación de Japón seis días más tarde y puso fin a la Segunda Guerra Mundial. Los ataques atómicos sobre ambas ciudades japonesas han sido los únicos de este tipo ejecutados hasta la fecha.