Este martes, la vicepresidenta de Uruguay, Beatriz Argimón, sostuvo una reunión con su homóloga argentina, Victoria Villarruel, en la ciudad de Buenos Aires. La cita, que se desarrolló en un ambiente de cordialidad y cooperación, según dijeron desde el Poder Ejecutivo, abordó diversos temas de índole parlamentaria y regional.
Los temas discutidos se centraron en las dinámicas parlamentarias de ambos países, el trabajo realizado a través de la Oficina de la Unión Interparlamentaria (UIP) de Uruguay, y la posibilidad de organizar un encuentro con los miembros del Grupo de América Latina y el Caribe (Grulac).
La visita de Argimón a Argentina se enmarcó en su participación en el III Taller Internacional de Académicos y Parlamentarios “Democracia y Parlamentos”, donde expuso sobre “Parlamentos y Asuntos Globales: los desafíos que vienen”.
Durante este evento, Argimón hizo hincapié en la necesidad de que los parlamentos se adapten a los nuevos desafíos globales, asegurando que el diálogo y la cooperación son esenciales para enfrentar los problemas comunes de la región.
Victoria Villarruel, tras la reunión con Argimón, expresó en su cuenta de la red social X: “Estrechamos los vínculos en común y compartimos nuestras experiencias en este rol tan honorífico que nos han dado nuestros pueblos a través del voto”.
Uno de los puntos clave de la conversación entre ambas vicepresidentas fue la situación en Venezuela y la reciente propuesta del gobierno argentino de conformar un bloque de países que no reconocieron el triunfo de Nicolás Maduro.
Esta propuesta, surgida ante la preocupación por la situación política y social en Venezuela, buscaría fortalecer las posiciones de los países de la región que han mostrado su desaprobación al régimen de Maduro.
Según información obtenida por el medio argentino La Nación, la canciller argentina Diana Mondino ha mantenido un contacto “directo y permanente” con sus homólogos de la región para discutir la posibilidad de una Cumbre en Buenos Aires.
Esta cumbre, aún sin fecha concreta, tendría como objetivo abordar la situación venezolana y buscar una mayor cohesión en las posiciones de los países participantes.
El Gobierno argentino considera esta situación “cada vez más compleja y radicalizada”, y ve en la cumbre una oportunidad de coordinación y de refuerzo de las relaciones diplomáticas entre los países que comparten esta visión. La iniciativa también refleja un intento de Argentina por tomar un papel más activo y líder en la región respecto a la crisis venezolana.
Durante su estancia en Buenos Aires, Beatriz Argimón también aprovechó para reunirse con otros altos funcionarios y legisladores argentinos, fortaleciendo así los lazos bilaterales entre Uruguay y Argentina. En todas sus intervenciones, Argimón destacó la importancia de la cooperación y el diálogo, no solo entre gobiernos, sino también entre las distintas instituciones parlamentarias de la región.
