Las protestas estallaron contra un sistema de cuotas que reserva el 30% de los empleos públicos a las familias de las personas que lucharon por la independencia de Pakistán en 1971
Tras 15 años en el poder, la primera ministra de Bangladesh ha dimitido repentinamente y ha huido del país. La salida de Sheikh Hasina se produce tras semanas de protestas estudiantiles respondidas con fuerza letal y ha sido recibida con júbilo en las calles de la capital, Daca.
Los estudiantes protestaban por un acceso más justo a los empleos públicos. La respuesta violenta provocó la muerte de más de 400 personas, lo que desencadenó un movimiento más amplio en favor de la justicia que ha obligado a Hasina a dimitir.
En un principio, los estudiantes exigían la supresión de un sistema de cuotas que reserva el 30% de los empleos públicos a las familias de las personas que lucharon por la independencia de Pakistán en 1971.
Sin embargo, la dura respuesta del Gobierno a las protestas desde mediados de julio hizo que éstas continuaran incluso después de que el Tribunal Supremo atendiera en gran medida las demandas sobre las cuotas hace dos semanas.
Internet estuvo totalmente cortado durante los peores momentos de la violencia, pero las imágenes que aparecieron mostraban a la policía y a miembros del ala estudiantil del partido gobernante, la Liga Awami, atacando a los manifestantes con fuego real, machetes y atropellándolos con vehículos. Los habitantes de Daca han descrito redadas nocturnas incesantes que se han saldado con la detención de 11.000 personas.
Las redadas continuaron durante la noche, antes de una protesta masiva que se había convocado para el lunes, pero entonces llegó el sorprendente anuncio de que Hasina había huido del país en helicóptero.
Esta mujer de 76 años era la primera ministra que más tiempo lleva en el poder en el mundo, desde 2009 y antes de 1996 a 2001.
Dirigió el partido fundado por su padre, Sheikh Mujibur Rahman, considerado el padre fundador de Bangladesh, vinculando estrechamente la legitimidad del partido a su legado. En 1975, Hasina sobrevivió al asesinato de su padre y toda su familia en un golpe de estado perpetrado por oficiales del ejército sólo porque ella y su hermana se encontraban en Europa en ese momento. Poco después se convirtió en la líder del partido.
Su mandato más reciente ha supuesto avances en materia de desarrollo y crecimiento económico, especialmente en el sector de la confección, pero muchos consideran que los beneficios se concentran sobre todo en Daca y en una élite extremadamente rica.
Su mandato también se ha caracterizado por un creciente autoritarismo. Gran parte de la oposición, especialmente el Partido Nacionalista de Bangladesh (BNP) y Jamaat-e-Islami, ha sido atacada y detenida. Se han generalizado las ejecuciones extrajudiciales y los periodistas han manifestado su temor a realizar las informaciones más elementales por si se consideraba que podían perjudicar al gobierno.
Durante el Gobierno de Hasina se han denunciado fraudes electorales y la oposición boicoteó las últimas elecciones, celebradas en enero.
Bangladesh se independizó de Pakistán en 1971, tras una amarga guerra de nueve meses en la que, según Bangladesh, murieron tres millones de personas y cientos de miles de mujeres fueron violadas.
El violento nacimiento del país sigue teniendo un papel divisorio en la política de Bangladesh y Hasina y la Liga Awami se han proyectado como los protectores del legado independentista.
Desde hace tiempo existe una amarga y a menudo violenta división entre la Liga Awami y el principal partido de la oposición, el BNP, cuya líder, Khaleda Zia, estaba casada con Ziaur Rahman, fundador del partido y presidente tras el asesinato del jeque Mujibur Rahman en 1975. Los partidarios de Ziaur Rahman han argumentado que fue en realidad él, entonces oficial del ejército que se sublevó contra las fuerzas paquistaníes, el primero en declarar la independencia y no Sheikh Mujibur Rahman.
Hasina también ha utilizado a menudo la colaboración de algunos grupos con el ejército paquistaní para denunciar a sus oponentes. Durante las protestas actuales enfureció a los estudiantes diciendo que los que estaban en las calles eran razakars, término que se refiere a una milicia bengalí que apoyaba al ejército pakistaní.
El ejército ha anunciado que ha tomado el control y que formará un gobierno provisional hasta que puedan celebrarse elecciones. Muchos esperan que el país no caiga en los mismos patrones que antes. La Liga Awami y el BNP se han disputado el poder desde la década de 1990, cuando se restableció la democracia tras un periodo de gobierno militar, pero el papel de los estudiantes en las recientes protestas ha suscitado esperanzas de una alternativa que rompa el ciclo.
El jefe militar, general Waker-Uz-Zaman, ha pedido a los manifestantes que regresen a sus hogares y ha prometido una investigación sobre los asesinatos.
Los líderes de las protestas antigubernamentales han propuesto este martes al premio nobel Muhammad Yunus como posible jefe del Gobierno interino que deberá formarse en las próximas horas.
Al parecer, un helicóptero trasladó a Hasina de Daca a India y se espera que solicite asilo en el extranjero.