En la actualidad, no queda duda alguna que los teléfonos inteligentes son los dispositivos más populares del mundo, ya que millones de personas cuentan con uno propio para llevar a cabo todo tipo de actividades. A pesar de la presencia masiva de los smartphones, lo cierto es que no muchos está al tanto de todos los elementos que los componen. ¿Sabías que tienen imanes? Te contamos por qué los integran en su diseño y cómo pueden afectar a tus tarjetas bancarias u otros equipos.
Como tal, hoy en día la gran mayoría de móviles incorporan imanes en sus interiores, como elementos que soportan piezas específicas y optimizan el funcionamiento interno. Por ejemplo, algunos modelos integran imanes de Neodimio, un material que destaca por su fuerte potencia magnética y tamaño compacto. También puedes encontrar imanes integrados en las mismas partes del celular, como los altavoces, micrófonos, cámaras, sensores, entre otros añadidos.
Uno de los aspectos a destacar es que los imanes también permiten tener una mejor orientación y detección de movimiento con el móvil. La precisión de las apps que utilizas, incluso la de los juegos, se eleva significativamente. En pocas palabras, son componentes discretos que aportan significativamente a la experiencia de uso de los celulares.
Si bien gran parte de los teléfonos del mercado cuentan con imanes integrados, lo cierto es que debido al tamaño de los mismos, la potencia que emiten no es elevada. El temor que hay con esos componentes es que al acercarlos a tarjetas de crédito, por ejemplo, se borren los datos adjuntos y queden totalmente inservibles. Sin embargo, hay que precisar que es una situación que solo ocurre cuando el dispositivo con magnetismo ejerce mucha fuerza con su campo (a veces pasa con celulares gama premium o muy potentes).
No obstante, hay que precisar que la potencia de los imanes aumenta significativamente en el caso del formato de los teléfonos plegables, ya que son componentes que para estos modelos se encargan de los dos lados juntos de forma segura. De hecho, las firmas que los fabrican advierten que es recomendable alejar los teléfonos de dispositivos con campos magnéticos, como las tarjetas de crédito, libretas, tarjetas de acceso, tarjetas de embarque, de estacionamiento, entre otras piezas que puedan dañarse, desconfigurarse o desactivarse (aplica también para gadgets con conectividad bluetooth).
