La bilbaína Gracia Alonso de Armiño decía en una entrevista a este medio que «estar en los Juegos Olímpicos es un regalo que me ha hecho el baloncesto a toda mi trayectoria». Este lunes el basket 3x3 le hizo un nuevo obsequio que no olvidará jamás. Tiene una medalla olímpica gracias a un campeonato enorme en el que España, pese a debutar en la especialidad, actuó como un equipo experto, con valentía y que no perdió la fe en sus posibilidades. «Quiero disfrutar de cada momento, pero también aviso que somos muy competitivas y vamos a ir a por todas». Dicho y hecho. España ya es plata en una disciplina que ha resultado muy atractiva de ver en estos Juegos. El basket 3x3 tiene un claro espíritu callejero , con su origen de esas competiciones bajo una canasta entre grupos de amigos, y eso se ha reflejado en París con la ubicación de la cancha en la sede de La Concordia, donde ha compartido protagonismo con el skate, el ciclismo BMX freestyle y el break. Todo está destinado en este lugar al espectáculo y se refleja tanto en el ambiente que se vive en grada como en toda la animación. Respecto al baloncesto 5 contra 5, lo más llamativo en este aspecto es que la música es una constante pero no es estridente, sino que es un acompañamiento para lo que sucede sobre la pista, mientras los speakers narran el partido para todos los espectadores, comentando cada acción, cada canasta o las personales que se suceden en unos encuentros que viajan a un ritmo trepidante. « Aquí va todo muy rápido, no hay un segundo de descanso , la toma de decisiones es fundamental y para los espectadores, desde luego, esos diez minutos son intensos y divertidos. Somos sólo cuatro, rotando continuamente... En el baloncesto a 5 tienes tu primer cuarto de tanteo, el descanso para realizar correcciones.... aquí no se para», explicaba Gracia Alonso sobre las características que definen al 3x3. Por eso también se requieren jugadoras que se adapten a este tipo de baloncesto, mucho más intenso. «Soy ese tipo de jugadora que los entrenadores sacan para revolucionar y cambiar el curso de un encuentro. Diez minutos a tope y después al banquillo. Esa intensidad, esa forma de competir tan física es ideal para el 3x3», explicaba la jugadora bilbaína de Estudiantes, integrante de un cuarteto donde se comparten muy bien los roles de cada jugadora. En cuanto a las cuestiones más técnicas, la cancha del 3x3 se reduce a una mitad de un campo convencional con una canasta, se trata de una pista de 15x11 metros y los partidos duran diez minutos o si algún equipo logra llegar a 21 puntos para 'cerrar' la victoria . Las posesiones son de 12 segundos y cada canasta vale un punto, mientras los lanzamientos exteriores -los triples en el baloncesto a cinco- suman dos. En cuanto a las personales, algo bastante común en un basket donde todo es tan veloz y tan peleado, se van acumulando y desde el momento en que una selección alcanza las siete cometidas, el rival tiene dos tiros libres. En España, como explicaba Gracia Alonso, no se ve de momento la posibilidad de crear una Liga. «De momento queda lejos. Es un deporte que se ve más como un espectáculo de verano, donde jugamos al aire libre y las que lo hacemos luego seguimos compitiendo en nuestros equipos», lo que obliga a un esfuerzo añadido para las cuatro jugadoras que componen la selección que esta noche ha hecho historia para el basket español.