La Guardia Civil ha descubierto que las cuentas bancarias de la mujer del expresidente del Comité Técnico Arbitral, José María Enriquez Negreira, ingresaron entre 1992 y 2023 cerca de tres millones de euros «aparentemente injustificados» que la sitúan como presunta perceptora de los fondos que había recibido él y que los agentes ponen en cuarentena en el informe final que han presentado ante el juez Joaquín Aguirre, que investiga el caso en Instrucción 1 de Barcelona. En un análisis preliminar de sus cuentas y productos bancarios, los agentes han detectado ingresos en cheques cuyo origen «no se ha podido acreditar» por cuantías que van desde 12.000 euros hasta superar los 127.000 . «Las salidas de dinero en estos años, en esas cuentas, fueron aproximadamente de 2.956.080,93 euros. En definitiva, todo lo ingresado en esas cuentas se retira, llegando a quedar la mayoría de ellas con un saldo final a 0,00 euros«, dice el informe al que tuvo acceso ABC. En paro desde 2018, la mujer, Ana Rufas, figuraba como autónoma en negocio de establecimiento de bebidas hasta que en septiembre de 2011 entró a trabajar en Nilsad SCP. En 2016 pasó a Dasnil 95. Ambas están vinculadas a Negreira y su hijo y en todo el periodo sus ingresos rondaron los 151.000 euros. «Teniendo en cuenta que Ana Paula Rufas habría percibido, de las sociedades NILSAD SCP y DASNIL 95 SL, como sueldo, una cantidad total de 151.014,24 euros, entre los años 2011-2018, que restado a los 2.977.557,51 euros que ingresa en cuentas en las que figura como titular daría un total de 2.826.543,27 euros de ingresos supuestamente no justificados«, resume la Guardia Civil, que emplaza a un análisis posterior más pormenorizado este asunto. Quiere revisar cada uno de los cheques. Es el fleco que queda abierto en un informe que se presenta como «final», de conclusiones de la investigación en torno a las actividades de Negreira. Entre sus conclusiones más relevantes, destaca que para la Guardia Civil, «no ha quedado acreditado que los pagos efectuados por el Fútbol Club Barcelona a empresas vinculadas« al otrora jefe de los árbitros y su hijo entre 2001 y 2018 »tuvieran como finalidad la realización de unos supuestos 'asesoramientos' en materia arbitral« como ellos aducían. «No se ha acreditado el destino final de 'informes arbitrales' confeccionados en el período 2014-2018 por Negreira al FCB ni se ha constatado la utilización de los mismos por parte de ningún departamento del club, incluido el cuerpo técnico«, dicen los agentes, para incidir en que lo que sí ha quedado »demostrado tras las pesquisas realizadas« es que el Barça »realizó pagos a empresas vinculadas« al vicepresidente del CTA mientras estaba en su cargo sin que conste »ningún contrato suscrito« entre el club y las empresas vinculadas a padre e hijo. Además, apunta que los mecanismos internos del Fútbol Club Barcelona «no detectaron irregularidades en los pagos objeto de investigación«. »Parece relevante indicar que los mismos cesaron en el momento (2018) en el que José María Enríquez Negreira fue cesado como vicepresidente del CTA«, añade el análisis policial, para resumir que fueron 7,5 millones de euros en el periodo 2001-2018 y »tampoco se sabe, ni se ha aportado a la causa, justificación o razón suficiente sobre en qué consistía el asesoramiento« por el que se supone, le estaban pagando.