La Unió Llauradora, una de las grandes organizaciones agrarias de la Comunidad Valenciana , prevé la cosecha más baja de uva de vinificación de los últimos 30 años en la región por culpa de la sequía, según ha informado la organización en un comunicado. Comienza la vendimia con la recolección de uvas blancas y moscatel en el conjunto de zonas productoras de la Comunitat Valenciana y las perspectivas de cosecha vienen marcadas por «la grave y prolongada sequía», según La Unió. En este escenario, la organización prevé un descenso productivo en una primera estimación del 29 por ciento, lo que puede suponer la cosecha «más baja de los últimos 30 años». «La sequía sigue causando estragos en los diferentes cultivos del campo valenciano». La organización agraria prevé una producción de uva de vinificación en la campaña 2024/2025 de alrededor de 1,47 millones de hectólitros , con una clara caída en relación con la pasada y que sería así un 42 por ciento más baja que la media de los últimos 30 años. Por Denominaciones de Origen, en la de Utiel-Requena y Valencia la disminución de cosecha respecto a la pasada podría ser del 30 por ciento, en la DO Alicante del 31 por ciento y en la IGP Vins de Castelló la bajada sería del 27 por ciento. Aparte del descenso de cosecha, La Unió ha señalado que «muchas viñas se están secando», lo que está provocando el creciente abandono de tierras de cultivo y de viticultores en la Comunidad Valenciana. En el lado positivo de la próxima campaña de vendimia, la organización destaca «la buena calidad de la uva y la ausencia de problemas sanitarios graves por enfermedades y hongos ». Sobre los precios, en estos momentos únicamente se podría hablar de un cultivo rentable en la vid para las uvas blancas destinadas a la elaboración de cava. Si el pasado año la media de las cotizaciones en origen fue de 0,70 euros/kilo, en esta ya pasan de 0,80 euro/kg y con perspectivas al alza. Para el resto, otras uvas blancas o variedades de uvas tintas las cotizaciones no cubren ni los costes de producción. Para la Unió, es necesario un repunte de precios con el objetivo de que «los productores de la Comunidad Valenciana vean compensada en parte la merma de cosecha y los elevados costes de producción que pagan por los insumos que emplean». La organización agraria insiste en reclamar a las diferentes Administraciones ayudas extraordinarias para los productores de uva de vinificación. En diversas ocasiones ha solicitado a la Conselleria y Ministerio de Agricultura que establezca con carácter de urgencia una ayuda excepcional y directa para estas explotaciones agrícolas y también para las de olivar, almendros, cereales y uva de mesa. Sin embargo, no ha habido una respuesta positiva a ninguna de estas demandas. En este sentido, un estudio reciente de La Unió certificaba ya en más de 24 millones las pérdidas para los viticultores de la Comunitat Valenciana por las consecuencias de la sequía. Además, únicamente contemplaba las pérdidas económicas directas y solo de esta campaña 2024/2025, sin tener en cuenta las de las próximas ni la muerte del arbolado o las pérdidas indirectas de mano de obra, bodegas, logística, etc. El cultivo del viñedo, junto al del olivar, son los únicos que no han tenido ayudas ni para compensar las pérdidas de la sequía o los efectos de la guerra de Ucrania, según la organización.