Estados Unidos es uno de los países con mayor actividad sísmica debido a su ubicación geográfica. El país norteamericano dispone de un sistema de alerta temprana administrado por el Servicio Geológico de Estados Unidos (USGS), encargado de monitorear todos los sismos en tiempo real. Revisa EN VIVO todos los detalles sobre el último movimiento telúrico registrado en EE. UU.
Los temblores son frecuentes en Estados Unidos debido a su localización en una región de alta actividad tectónica. El país se sitúa en el límite de varias placas tectónicas importantes, como la Placa del Pacífico y la Placa de América del Norte. La interacción entre estas placas, especialmente a lo largo de la falla de San Andrés en California, provoca deslizamientos y choques que liberan grandes cantidades de energía en forma de terremotos. Además, otras zonas sísmicamente activas, como Alaska y las Montañas Rocosas, también contribuyen a la alta frecuencia de estos eventos sísmicos.
Los terremotos pueden desencadenar grandes desastres naturales por la liberación repentina y violenta de la energía acumulada en las placas tectónicas, generando ondas sísmicas que se propagan a través de la Tierra. Estas ondas pueden provocar intensos movimientos del suelo, afectando estructuras construidas por el hombre como edificios, puentes y carreteras. Si estas construcciones no están diseñadas para soportar fuertes movimientos sísmicos, pueden colapsar, resultando en grandes daños materiales y pérdidas de vidas.