Los carburantes vuelve a dar un respiro a los conductores en plenas vacaciones de verano. Según el Boletín Petrolero de la UE correspondiente a la semana del 23 al 29 de julio, a las puertas de la primera operación salida de agosto, los combustibles prosiguieron su tendencia a la baja y se abarataron hasta un 0,6%.
En concreto, el precio medio del litro de gasolina se abarató un 0,37% con respecto a la pasada anterior, para caer hasta los 1,611 euros, su nivel más bajo desde la primera semana de marzo, y sumó dos semanas de descensos. Por su parte, el diésel cayó un 0,6%, acumulando tres descensos consecutivos, hasta costar 1,483 euros el litro, su nivel más bajo desde la última semana de junio.
Estas caídas en los precios de los carburantes se produjeron a las puertas de la primera operación salida de agosto, en la que la Dirección General de Tráfico (DGT) prevé entre este miércoles y hoy jueves un total de 3,1 millones de desplazamientos por las carreteras españolas.
Con los precios actuales, llenar un depósito medio de 55 litros de gasolina tiene un coste de unos 88,6 euros, unos 2,15 euros menos que en las mismas fechas del año pasado, cuando ascendía a unos 90,75 euros. Para los vehículos de diésel, llenar un depósito medio (55 litros) supone un desembolso actualmente de 81,56 euros, en torno a un euro menos que en la misma semana de 2023, momento en el que el precio era de 82,55 euros.
El precio medio del litro de diésel se sitúa por encima de los niveles en que estaba antes del estallido de la invasión rusa de Ucrania, que comenzó el 24 de febrero de 2022, cuando era de 1,479 euros el litro. Lo mismo ocurre con la gasolina, que por aquel entonces costaba 1,592 euros el litro. Sin embargo, ambos carburantes continúan lejos de los máximos que registraron el verano de 2022, en julio, cuando la gasolina alcanzó los 2,141 euros y el gasóleo los 2,1 euros.
Igualmente, el diésel suma ya 75 semanas por debajo del precio de la gasolina. Se mantiene así en la situación habitual anterior a la invasión rusa de Ucrania, que provocó que el precio del gasoil fuese más caro que el de la gasolina de forma continuada desde agosto de 2022 hasta mediados de febrero de 2023, cuando se rompió la dinámica.
Con estos niveles, el precio de la gasolina sin plomo de 95 se mantiene en España por debajo de la media de la Unión Europea, situada en 1,730 euros el litro, y de la eurozona, con un precio medio de 1,780 euros. En el caso del diésel, el precio en España también es inferior al de la media de la UE, que es de 1,606 euros, y de la zona euro, donde marca un precio de 1,629 euros.
