Los Juegos Olímpicos no son solo sonrisas, más bien todo lo contario, pues de los más de 10.000 deportistas que participan en París 2024 solo unos pocos privilegiados volverán a casa con un metal, un diploma o un recuerdo dulce en la memoria. Este miércoles, la legendaria futbolista brasileña Marta Vieira da Silva , sumó uno duro momento a su prolongada carrera. En el duelo entre las sudamericanas y la selección española que cerraba el grupo C, 0-0 al descanso, un balón dividido provocó una dura acción de la delantera sobre Olga Carmona . Tras un rechazo, el balón quedó dividido al borde del área brasileña y la defensa del Real Madrid se lanzó para recuperarlo. Marta hizo lo mismo, pero se pasó de frenada. Los tacos de la delantera impactaron en la cabeza de la andaluza, que se fue inmediatamente al suelo entre gestos de dolor. El árbitro noruego Espen Eskas lo tuvo claro desde el principio. Marta, expulsada por roja directa, circunstancia que no solo dejó a sus compañeras en inferioridad numérica durante el resto del duelo. Sus lágrimas mientras se retiraba del terreno de juego daban la vuelta al mundo, ya que la jugadora fue una de las primeras estrellas del fútbol femenino (ganadora del Balón de Oro 2010) y, tras su expulsión, podía estar despidiéndose de los Juegos Olímpicos para siempre tras participar en la últimas seis ediciones.