Este martes, el expresidente José Mujica y la exvicepresidenta Lucía Topolansky abordaron el tema de las elecciones en Venezuela, generando una significativa repercusión política dentro de Uruguay.
En declaraciones al diario El País, Lucía Topolansky afirmó que “estamos esperando la visualización de las actas para saber” en relación a la información que debe ser proporcionada por el Consejo Nacional Electoral (CNE) de Venezuela, el cual está bajo la administración del gobierno de Nicolás Maduro. “Hay que mirar toda la información que hay para poder decir algo”, explicó. Expresó que el comunicado del Frente Amplio es claro al solicitar la presentación de las actas.
“También están las actas que recogió la oposición. Hay que chequear todo y después se verá la legitimación de ese proceso”, añadió.
Topolansky calificó el acto electoral como “muy confuso, muy sospechoso” y subrayó la falta de información, indicando que precipitarse a conclusiones podría ser más dañino que beneficioso. “Estamos muy preocupados”, señaló.
El Partido Comunista del Uruguay (PCU) se pronunció a favor de las elecciones en Venezuela y criticó duramente a “la derecha y el imperialismo yanqui”, en un contexto de polarización política regional. Topolansky destacó el papel de Brasil, que llamó la atención internacional sobre la situación, y mencionó que países como Colombia, Chile, Guatemala, Uruguay y Paraguay han adoptado una postura similar.
La exvicepresidenta expresó la necesidad de abordar la situación con una perspectiva compleja y completa. “Por eso yo no estoy apurada”, puntualizó, aludiendo a la solicitud de la verificación exhaustiva de las actas electorales.
También subrayó la importancia de demostrar la existencia de un presunto ataque informático.
Topolansky concluyó que “hay más preguntas que respuestas”, y que la mayoría de los países han mostrado mesura, a excepción de las reacciones del presidente argentino Javier Milei, conocido por su habitual tono estridente.
Por otro lado, Topolansky mostró preocupación por la reciente expulsión de la embajadora uruguaya y otros diplomáticos de Venezuela. “Es preocupante, porque cuanto más países del mundo con los que tengamos relación es mejor”, señaló.
Recordó que durante los últimos años del gobierno del Frente Amplio se tomó tiempo para nombrar a un embajador, subrayando que este gobierno finalmente logró nombrar a una embajadora en Venezuela. Abogó por evitar los conflictos internos y no mezclar estos asuntos con cuestiones electorales nacionales, señalando que “algunos buscan imponer una lógica irresponsable de griterío y cotorrerío”.
José Mujica, por su parte, se distanció del comunicado emitido por el Movimiento de Liberación Nacional Tupamaros (MLN-T), que calificó las elecciones del domingo 28 de julio en Venezuela como un “acto eleccionario ejemplar”. “Nada tiene que ver”, comentó el expresidente a la revista Búsqueda, destacando que no fue consultado ni participó en la elaboración del comunicado, y que no lo representa, asegurando que hablará más adelante sobre el tema.
Mujica expresó que actualmente no hay información confiable respecto a lo sucedido en las elecciones, tanto de un lado como del otro. Confirmó que mantiene «dudas» en cuanto a los resultados oficiales que declararon vencedor a Nicolás Maduro sobre el opositor Edmundo González Urrutia. Indicó que su posición es similar a la del presidente brasileño Luiz Inácio Lula Da Silva, quien evitó pronunciarse definitivamente hasta contar con más datos sobre el proceso electoral.