La Policía Nacional ha detenido a cuatro personas que integraban un grupo criminal itinerante dedicado a los hurtos en lugares públicos concurridos de Alicante , en los que se hacían pasar por turistas. Su objetivo eran principalmente personas de avanzada edad. Los detenidos son dos mujeres de nacionalidad peruana , de 25 y 27 años, y dos hombres, uno de ellos cubano , y el segundo español , de 27 años de edad. Todos ellos fueron puestos a disposición de los Juzgados de Instrucción de Guardia de Alicante . Según informa la Policía Nacional , las patrullas de servicio acudieron a una vía principal de la zona centro de la capital alicantina alertados por varios testigos que informaron de lo que parecía ser una riña entre dos varones. De acuerdo con las mismas fuentes, «uno de los participantes en el forcejeo narró a los policías que había observado cómo dos varones trataban de sustraer al descuido los efectos que portaban en el interior de sus bolsos dos ancianas que paseaban por la ciudad». El testigo trató de impedirlo y se encaró con los autores , quienes respondieron enfrentándose a él, iniciándose una pelea que concluyó con el abandono del lugar de los dos presuntos autores junto con otras dos mujeres que permanecían en las cercanías del suceso. Tras poner en conocimiento los hechos de la Policía Nacional a través de una llamada a la Sala CIMACC del 091, inmediatamente se llevó a cabo un despliegue policial en aras de la localización de los implicados, «finalizando exitosamente la intervención con la detención de cuatro implicados, dos varones y dos mujeres que los acompañaban». Posteriormente, los agentes del grupo de investigación de la Policía Nacional observaron que los detenidos podrían estar implicados de forma directa con dichas denuncias, por lo que realizaron una revisión minuciosa de tales hechos. Tras diversas pesquisas realizadas consiguieron relacionarlos con otros doce hechos delictivos de hurtos y estafas . Los arrestados utilizaban lo que, en argot policial se conoce como «muleta» , es decir, usar alguna bolsa, prenda de ropa o similar que esconde la acción propia de la sustracción del objeto. Asimismo, «los presuntos autores tampoco dudaban en hacer uso de las tarjetas de crédito que sustraían, tratando de hacer cargos fraudulentos con ellas». Según la Policía Nacional , «los arrestados conformaban un grupo perfectamente estructurado y organizado, itinerante y especializado en este tipo de robos». Aprovechaban aglomeraciones en transportes públicos y comercios, eligiendo principalmente como víctimas a ancianos con dificultades de movilidad, con el objetivo de «perpetrar los ilícitos con la mayor impunidad posible». Los implicados usaban complementos y distintas prendas de ropa que combinaban con el fin de aparentar ser turistas y pasar desapercibidos, «no dudando en usar la violencia en caso de ser descubiertos, como fue el caso que propició su detención cuando fueron detectados por un testigo».