Es un espectáculo ver cómo
Dillon Brooks interpreta su papel de villano, haciéndose odiar como el que más en el equipo rival. El alero de los Houston Rockets, que saltó definitivamente a la fama por su patada a
LeBron James en sus partes nobles en los playoffs de 2023, ‘patentó’ una nueva triquiñuela en el triunfo de la Canadá de Jordi Fernández contra Grecia el sábado.
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