París.- En modo lluvia, fuerte a ratos, incisiva siempre, el tándem cubano de Noslen Díaz-Jorge Luis Ayalo (Noslen-Alayo) se robó el show en el improvisado campo de voleibol de playa (arena sí, pero por mar el Sena) donde debutaron este sábado ante una yunta de estadounidenses de mejor abolengo mundial.
En el majestuoso escenario al lado de la torre Eiffel, con pocos espacios libres en el graderío pese al clima, el dúo caribeño se impuso por 2-0 con iguales mangas de 21-18.
Ubicados en el noveno puesto del ranking mundial, los norteños Partain-Benesh no pudieron con el empuje de unos muchachos que suman menos años que las demás parejas en competencia (45 años y 34 días), pero han tenido una temporada de ensueño, con la cual aseguraron el cupo olímpico.
Se montaron sobre los rivales después de un inicio incierto, y desde entonces sostuvieron la iniciativa con un juego sincronizado y tácticamente bien ejecutado.
Hay química en estos jugadores de la Isla. Se divirtieron sobre las arenas e hicieron divertirse a quienes fueron a verlos. Fue un espectáculo, adelanto de lo que podrían seguir haciendo en esta olimpiada. «No me pierdo el próximo juego de ellos», me dijo en español afrancesado un señor al término del partido.
«Mi compañero es todo para mí, estoy superorgulloso de sus valores y combatividad, y juntos armamos un show en el terreno», confesó Alayo. «Queremos que el pueblo cubano disfrute de nosotros, de nuestro esfuerzo para llegar a estos Juegos».
Uno y otro dedicaron elogios a la instalación, su mística, el simbolismo de jugar al lado de la torre Eiffel. «No todos los días uno está en un lugar así, una de las maravillas del mundo, eso nos motivó más», comentó Noslen.
Foto: Roberto Morejón
Con esta victoria están virtualmente clasificados para la siguiente instancia del torneo, a la que acceden de manera directa los dos mejores elencos por grupo. Solo necesitan doblegar a los marroquíes Abicha-Elgraoi, alojados en el escaño 178 del escalafón global, para asegurar su pase por el apartado D.
Antes, Noslen-Alayo, ascendidos poco a poco al puesto 12 del ranking del orbe, chocarán con los brasileños George-Andre, favoritos para liderar la llave preliminar, amparados en el tercer lugar en el listado de los mejores de la Federación Mundial de Voleibol (FIVB, por sus siglas en inglés).
Sin embargo, la convincente actuación de los cubanos en su primera presentación y lecciones aprendidas tras varios juegos ante los sudamericanos hacen presagiar que el martes 31 de julio se vivirá un espectáculo de rivalidad y entrega sublimes sobre la arena parisina.
¿Hasta dónde pueden llegar?, preguntó un colega en la zona mixta y Alayo remató con tanta seguridad como fuerza en sus acciones de juego: «el sueño empezó en Catar cuando comenzamos a sumar puntos para la clasificación, un resultado que algunos vieron lejos, pero nosotros siempre pensamos que sí era posible, ahora saldremos, en cada juego, a darlo todo y a ganarnos el público».
¿Mejor la lluvia que el calor? «Somos cubanos, preferimos el sol fuerte, pero así es el voleibol de playa. Estamos preparados para jugar sea con frío, lluvia o 40 grados de temperatura... Lo de nosotros es jugar y divertirnos», sentenció Alayo mientras el agua seguía cayendo sobre esta urbe que ha tenido un arranque olímpico demasiado mojado.
