El calor intenso lleva semanas siendo protagonista en España, donde, en muchos territorios, se han superado los 40 grados con creces. Con una ola de calor de por medio y el verano haciéndose notar, los diferentes métodos para combatir el calor salen a relucir como cada año. Los más afortunados cuentan con una piscina, río o mar cerca de casa, donde refrescarse durante los días en los que el calor es más acusado. Para el resto, lo más sencillo es utilizar un ventilador o el aire acondicionado, sumado a prácticas tomar bebidas frescas e hidratantes, evitar las comidas pesadas, no salir a la calle en las horas centrales del día, ponerse protección solar o prestar especial atención a personas con problemas de salud, embarazadas, niños y ancianos. Además de para paliar el calor, estas medidas son imprescindibles para evitar riesgos como sufrir un golpe de calor u otras complicaciones derivadas de las altas temperaturas. Pero, aunque pongamos en marcha todas estas acciones, en algunos momentos, como por las noches , el calor puede llegar a ser difícil de soportar. Por ello muchas personas recurren a los ventiladores y aires acondicionados pero, normalmente, los apagamos pasadas unas horas en funcionamiento por miedo a que nuestra factura de la luz se incremente demasiado. Sin embargo ¿esto es un mito o realmente su uso muy continuado encarece tanto lo que nos cobran de electricidad? A continuación respondemos a esta cuestión, específicamente referida a los ventiladores. Puede que esta cuestión haya surgido en la cabeza de muchas personas en varias ocasiones durante el verano. La tentación de quedarnos dormidos con el ventilador en marcha es grande, sobre todo en esas noches torpicales en las que no corre ni una ligera brisa. Así, lo habitual suele ser apagar el aparato para no gastar demasiado electricidad pero la realidad es que dejarlo encendido durante las horas que dura la noche no sería tan caro como pudiéramos imaginar. Esto es lo que ha explicado un experto energético en el programa 'Tiempo al Tiempo' de Cuatro, llamado Javier Dasí. Según el experto: «Un ventilador suele consumir unos 50 vatios y si lo tenemos ocho horas, durante toda la noche, a un precio de 15 céntimos el kilovatio/hora, a final de mes nos va a costar unos dos euros ». Además, Dasí realiza una comparativa con el mismo escenario pero utilizando el aire acondicionado en lugar del ventilador, dle que dice que el consumo sí aumentaría considerablemente: «Va a consumir la primera hora unos 1.000 o 1.200 vatios, pero el resto de las horas va a estar consumiendo la mitad, unos 500 vatios. De esta forma, la factura de la luz se incrementará ese mes entre 20 y 25 euros más », explica. Algo que, aunque no excesivamente caro, sí que notaríamos más a final de mes.
