El candidato republicano a la presidencia de la primera potencia mundial afirmó el 26 de julio que, si no logra ganar las elecciones de noviembre, podría haber una “gran guerra” en Oriente Medio y, potencialmente, una “Tercera Guerra Mundial”.
Este comentario se produjo durante la reunión de Trump con el primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, en su residencia de Mar-a-Lago, en Florida. Este encuentro tuvo lugar un día después de que Netanyahu se reuniera por separado con el presidente de Estados Unidos, Joe Biden, y la vicepresidenta, Kamala Harris, en la Casa Blanca.
"Si ganamos (las elecciones), será muy sencillo. Todo se resolverá y muy rápidamente", dijo Trump a los periodistas al comienzo de la reunión.
Sin embargo, el exmandatario advirtió que, si no logra llegar a la presidencia, se producirían las siguientes consecuencias: “Terminaremos con grandes guerras en Oriente Medio y tal vez una Tercera Guerra Mundial”.
Además, agregó: “Estamos más cerca de una Tercera Guerra Mundial en este momento que en cualquier otro desde la Segunda Guerra Mundial. Nunca hemos estado tan cerca, porque tenemos gente incompetente al mando de nuestro país”, alertó Donald Trump.
El líder republicano recibió al primer ministro israelí en la puerta de su mansión. Un apretón de manos marcó el inicio del encuentro, que se llevó a cabo en la residencia de Trump. Este momento fue captado en un video publicado en redes sociales.
Además, el exmandatario expresó su solidaridad con Israel tras el "atroz ataque" del 7 de octubre de 2023 y prometió que, si regresa a la Casa Blanca, hará todo lo posible “para llevar la paz al Medio Oriente y evitar que el antisemitismo se propague por los campus universitarios de Estados Unidos”.
"Ningún presidente ha hecho lo que yo he hecho por Israel", dijo Trump durante lo que parece el final de un almuerzo, según un vídeo divulgado en las redes sociales.
Por su parte, el primer ministro israelí agradeció el trabajo realizado para "promover la estabilidad en la región, incluyendo logros históricos como los Acuerdos de Abraham y el traslado de la Embajada de los Estados Unidos en Israel a Jerusalén", según la página web de la campaña del exmandatario.
Además, le agradeció el “reconocimiento de la soberanía israelí sobre los Altos del Golán, la eliminación de Qasem Soleimani (exgeneral al frente de la Fuerza Quds de los Guardianes de la Revolución iraní)” y el fin del “horrible acuerdo nuclear con Irán”.
Como se recuerda, Benjamin Netanyahu viajó esta semana a Washington para dirigirse al Congreso e instar a los funcionarios electos a que continúen apoyando a Israel en su guerra contra Hamás en Gaza.
En el marco de la reunión del 25 de julio, Kamala Harris advirtió a Netanyahu que “no se quedará callada” ante el sufrimiento humano en Gaza.
“Acabo de decirle al primer ministro Netanyahu que es hora de cerrar el acuerdo. A todos los que han estado pidiendo un alto el fuego y anhelan la paz, los veo y los escucho. Hagamos el acuerdo para lograr un alto el fuego y poner fin a la guerra”, declaró Harris ante la prensa al final del encuentro.
En relación con los comentarios de Harris a los periodistas el jueves después de su reunión con Netanyahu, Trump declaró este viernes a CNN en Mar-a-Lago que dichos comentarios fueron “irrespetuosos con Israel”.