Douglas Soto, gerente general del Banco de Costa Rica (BCR), confirmó que la institución financiera ejecutará un aporte inmediato de capital por ¢22.000 millones a su subsidiaria BCR SAFI tal y como lo solicitó la Superintendencia General de Valores (Sugeval), en una resolución del 22 de julio pasado.
La medida ordenada por el supervisor tiene como fin reforzar la capacidad financiera de la administradora de fondos de inversión en caso de que se vea impactada por la pérdida de valor del inmueble Parque Empresarial Pacífico (PEP), propiedad del fondo BCR Inmobiliario No Diversificado.
Soto afirmó que la medida implicará que BCR Sociedad Administradora de Fondos de Inversión (BCR SAFI) alcance un capital por encima de $55 millones como patrimonio, lo cual la convertirá en la sociedad de mayor capital en Costa Rica y Centroamérica.
“Recibidos la nota de la Sugeval, lo valoramos y lo analizamos. El Banco de Costa Rica está totalmente de acuerdo en capitalizar a la sociedad por esa suma de dinero. La sociedad tendrá un patrimonio de $55 millones, más grande que algunos bancos privados (...) consideramos que para nuestros inversionistas y clientes es una medida para resguardar a la sociedad”, precisó Soto, durante una conferencia de prensa este viernes.
Por su parte, Luis Emilio Cuenca, presidente de la Junta Directiva del BCR SAFI, confirmó que el BCR, como conglomerado financiero, cumplirá con todas las medidas ordenadas por la Superintendencia, lo cual incluye que la SAFI no repartirá dividendos a su casa matriz, el BCR.
“La Superintendencia hizo una resolución que toca a la casa matriz, en la que ordena al único accionista de BCR SAFI, que es el Banco. En este momento se necesita una toma de decisión del Banco para cumplir. Tenemos un compromiso absoluto con la orden del regulador”, aseguró Cuenca.
Entre tanto, Douglas Montero, gerente de BCR Sociedad Administradora de Fondos de Inversión (BCR SAFI), aclaró que la no distribución de utilidades es solo hacia el Banco como propietario de la administradora de fondos.
“Los inversionistas en los fondos de inversión (administrados por BCR SAFI) van a seguir recibiendo los dividendos que retornen las inversiones en los fondos, siempre. Los inversionistas no se verán afectados en su flujo, el que no va a recibir dividendos de la SAFI es su casa matriz”, recalcó.
Sugeval teme por supervivencia de BCR SAFI
Montero añadió que la Junta Directiva de la sociedad administradora ya había decidido no repartir utilidades al Banco para el 2024 y continuará así en los próximos periodos dado el mandato de Sugeval.
La Sugeval concluyó, en el oficio SGV-R-128-2024 del pasado 23 de junio, que BCR Sociedad Administradora de Fondos de Inversión (BCR SAFI) podría caer a un nivel en el que ya “no sea viable su operación”, debido a la pérdida de valor del PEP.
Entre las medidas ordenadas por la Sugeval están suspender la distribución de dividendos a los accionistas de BCR SAFI, es decir, el BCR como propietario de la sociedad. Además, le ordenó pedir a su casa matriz un aporte adicional de capital por ¢22.000 millones, a más tardar el 31 de diciembre de 2024, como contingencia.
La capitalización se instruyó porque, en febrero del 2020, el Fondo de Inversión Inmobiliario No Diversificado, administrado por BCR SAFI, compró el PEP en $70,8 millones. Sin embargo, en febrero anterior, un avalúo tasó el inmueble en $28,08 millones, lo cual representó una pérdida de valor de $42,1 millones, lo que equivale a ¢22.400 millones al tipo de cambio del cierre de junio pasado.
“Dado que los procesos judiciales y administrativos citados están en curso y que el Parque Empresarial del Pacífico continúa como un activo del fondo bajo administración y responsabilidad de BCR SAFI, existe la contingencia real de que BCR SAFI tenga un impacto derivado del ajuste en el valor del bien inmueble, que debe ser atendido con recursos de la sociedad, en el momento que corresponda y sobre el importe que se determine finalmente”, se indica en la resolución
El Gerente General del BCR especificó que la capitalización a la subsidiaria se tomará de la partida de inversiones transitorias del banco. La medida, según detalló, implica una reducción de la suficiencia patrimonial de 55 puntos base (0,55 puntos). El indicador quedará en 14,90% desde el 15,45% en que estaba previo al aporte hecho a la subsidiaria.
La suficiencia es vital al evaluar la solidez del capital de las entidades financieras pues revela su capacidad para hacer frente a los riesgos inherentes a su actividad y refleja su solvencia y estabilidad financiera.
“Los ¢22.000 millones son de inversiones transitorias y se pasan de una bolsa a otra porque pasarán a inversiones de la subsidiaria. Desde el punto de vista del balance del banco no tiene ninguna afectación”, manifestó el jerarca.
El vocero de la entidad bancaria resaltó que la capitalización no tendrá un efecto sobre las utilidades de este año. En el primer semestre, el BCR tuvo ganancias netas por ¢25.422 millones y la previsión es que asciendan a ¢46.000 millones al cierre del año.
Tomás Soley, jerarca de la Sugeval, informó este viernes de que la entidad dictó esta serie de órdenes prudenciales para fortalecer la capacidad financiera de BCR SAFI en favor de los inversionistas de los fondos administrados por la subsidiaria del banco estatal.
“Las medidas son para garantizar la capacidad de BCR SAFI ante eventuales pérdidas que pudieran serle achacables debido a la responsabilidad solidaria por sus actuaciones en los temas que le damos seguimiento (a la sociedad administradora)”, manifestó.
La institución supervisora destacó que las medidas solicitadas son aplicables a BCR SAFI y, por tanto, no afectan la operación normal de los fondos de inversión por ella administrados.
Soley, además, recordó que la Superintendencia mantiene en proceso investigaciones y procedimientos administrativos en curso. “Hemos colaborado con las autoridades judiciales que han estado analizando estos temas (de BCR SAFI)”, apuntó.
La Sugeval investiga, desde setiembre del 2022, la compra del PEP para el Fondo de Inversión Inmobiliario No Diversificado. Sin embargo, la institución fiscalizadora amplió la pesquisa por la adquisición de otros inmuebles efectuados por la sociedad administradora para sus fondos.
