La novelista vallisoletana, que vivió muchos años exiliada en Buenos Aires y Río de Janeiro, se destacó por una narrativa caracterizada por su pureza y exigencia
Hace justo 30 años, el 27 de julio de 1994 falleció Rosa Chacel, una de las novelistas españolas más importante de la segunda mitad del siglo XX, a los 96 años de edad.
Nacida en Valladolid el 3 de junio de 1898, pronto se trasladó con su familia al madrileño barrio de las Maravillas, al que en 1976 le dedica una novela homónima, cumbre de su narrativa, por la que recibió el Premio de la Crítica.
Chacel, asimilada a la generación del 27 cultivó todos los géneros literarios, destacándose en el de la novela, con obras destacadas como 'Memorias de Leticia Valle' (1945) y 'La sinrazón' (1960), la más laureada por la crítica.
La escritora castellana, después de un breve exilio en París, Atenas y Ginebra, vivió en Buenos Aires y Río de Janeiro, donde su marido, el pintor Timoteo Pérez Rubio, que ejerció de director del Museo del Prado durante la Guerra Civil, emprendió algunos negocios mineros.
Chacel, con una obra caracterizada por su pureza y exigencia, regresó a España en 1974. En 1987 recibiría el Premio Nacional de las Letras y en 1993 la Medalla de Oro al Mérito de Bellas Artes. También fue nombrada doctora honoris causa por la Universidad de Valladolid.
De su novela 'Barrio de Maravillas', la que la consagró, Javier Marías dijo que "Su inconmensurable capacidad de observación preside una novela en la que el método de transformación de la realidad es admirable." Sus 'Memorias de Leticia Valle' fueron consideradas por Andrés Trapiello como "una pequeña obra maestra".
