Entrevista a Darlen González Sábado, primera secretaria del comité municipal de la Unión de Jóvenes Comunistas (UJC) en Isla de la Juventud
NUEVA GERONA, Isla de la Juventud. — Para Dayne Darlen González Sábado, primera secretaria del comité municipal de la Unión de Jóvenes Comunistas (UJC) en Isla de la Juventud, es un deber salvar la revolución y mantener la unidad entre todos los cubanos.
La joven de 30 años, graduada de Técnico Superior en Economía y que asumirá desde ahora la responsabilidad de liderar el universo juvenil en este municipio especial, dialogó con JR sobre los objetivos, estrategias y perspectivas de la organización juvenil para la próxima etapa.
«Metas tenemos muchas, pero la prioridad es que la UJC en Isla de la Juventud logre de manera sostenible resultados satisfactorios, a pesar de las difíciles circunstancias por las que estamos pasando los jóvenes, más allá de la militancia o no, por lo que cobra mayor importancia enfocar cada acción hacia los comités de base y desde allí hacia todo el universo juvenil.
«Ese es el escenario donde realmente están los jóvenes que no son militantes y que de igual modo tenemos que darle especial atención y tratamiento.
Las dificultades de nuestros jóvenes están ahí, en la base, y es en ese entorno donde se deben buscar las soluciones, motivar la participación, escuchar todas las propuestas y apoyarlas para que se conviertan en realidades.
«Creo en las proposiciones de todos los jóvenes, no solo la de los militantes, sin embargo, todavía no logramos incorporar a la mayoría, por ejemplo en una de las acciones que hacemos para apoyar la higienización del hospital Héroes del Baire en Isla de la Juventud, solo participamos los funcionarios del comité municipal, una deuda que debemos resolver en la etapa venidera.
«Otro de los escenarios que urge «ocupar» por los jóvenes pineros es el relacionado con la producción de alimentos, una de las principales tareas que hoy nos está pidiendo la dirección del país, del territorio específicamente y un señalamiento en la reciente visita al municipio del Presidente de la República, Miguel Días-Canel Bermúdez, un desafío que vamos a solucionar.
«En primer lugar, la tarea inicial es sensibilizar a los jóvenes con la necesidad de participar en los procesos a los que nos convoca hoy la Revolución, tenemos que ser capaces de enamorarlos, cambiar la rigidez de las dinámicas de la organización por otras más atractivas, sin perder la esencia por supuesto.
«Cuando logremos que nuestras organizaciones de base funcionen correctamente y logren involucrar al universo en las tareas y actividades, creo que vamos a lograr que nuestros jóvenes se sientan atendidos por la organización.
«Entre las prioridades figura, además, el fortalecimiento del vínculo de los jóvenes con la historia (la nacional y la local), principalmente los aspectos relacionados con el Comandante en Jefe Fidel Castro Ruz, sus ideas y enseñanzas sobre la Revolución, el Socialismo y nuestro compromiso con la continuidad de ese legado, hoy con mayor relevancia al no estar físicamente entre nosotros.
«Por eso una de las líneas de trabajo o de la estrategia para fortalecer el funcionamiento de la UJC pinera, las organizaciones estudiantiles y los propios movimientos, está principalmente bien situada en la política de cuadro, la vida interna, el trabajo ideológico, la participación en labores productivas, la defensa de la Patria y en las tareas educativas y de impacto social.
«Estos han sido seis frentes que ha diseñado la UJC en el país en el XII Congreso a los que hay que tratar de darles cumplimiento, si pretendemos perfeccionar o continuar fortaleciendo nuestra organización juvenil y uno de los escenarios más complejos en la actualidad son las redes sociales de internet.
«Como jóvenes comunistas, tenemos también la responsabilidad de enseñar a las nuevas generaciones sobre los peligros de la desinformación y las falsas noticias que sobre Cuba circulan en esas redes; sobre la violencia, el embarazo en la adolescencia y otros fenómenos que ocupan y preocupan a los jóvenes en Cuba y en particular en Isla de la Juventud.
«Ese es uno de los retos más grandes que enfrentamos, conscientes de que el enemigo quiere fracturar la unidad entre nosotros mismos y la propia Revolución. Por eso, salvar la Revolución no es un reto, es un deber.
