El Banco Santander mantiene su senda de crecimiento y obtuvo en el primer semestre de este año un beneficio neto de 6.059 millones de euros, un 16% más con respecto al mismo periodo del año anterior, gracias al crecimiento de los ingresos en todos los negocios, que alcanzaron el récord de 31.050 millones, a la captación de cuatro millones de clientes y al control de los costes que compensaron con creces el crecimiento previsto de las provisiones, según informó la entidad este miércoles a la Comisión Nacional del Mercados de Valores (CNMV).
Todo ello, pese a que en el primer trimestre abonó el gravamen temporal a la banca, que supuso 335 millones, por encima de los 224 millones pagados el año pasado. Estos buenos resultados, que superan las previsiones de los analistas, le permiten mejorar los objetivos fijados para el conjunto del año y repartir más 6.000 millones de euros de dividendo con cargo a los resultados de 2024 si la entidad alcanza todos sus objetivos.
En la información remitida a la CNMV, la entidad notificó que los ingresos aumentaron un 9%, hasta una cifra récord de 31.050 millones de euros. El incremento de la actividad de clientes y la buena gestión de los márgenes apoyaron un repunte del 11% del margen de intereses, con aumentos en todos los negocios. Por su parte, los ingresos por comisiones aumentaron un 6%, hasta el récord semestral de 6.477 millones de euros por la mayor actividad en todos los negocios. "Más del 95% de los ingresos provienen de clientes, lo que refleja la calidad y recurrencia de los resultados de Santander", señala la entidad.
De este modo, el banco español registró rentabilidad sobre el capital tangible (ROTE) del 15,9%, por encima del 14,5% de un año antes, y se eleva al 16,3% "si se distribuye uniformemente a lo largo del año el impacto del gravamen a la banca en España", apunta la entidad. La ratio de capital CET1 "fully loaded" -incluyendo todos los requerimientos normativos- subió al 12,5%, por encima del objetivo del grupo, tras mejorar 20 puntos básicos en el segundo trimestre, gracias a que la fuerte generación orgánica de capital en el trimestre más que compensó el cargo para la futura remuneración al accionista con cargo a los resultados de 2024.
En la primera mitad de 2024, los recursos de clientes -correspondientes a depósitos más fondos de inversión- crecieron un 5%, con un aumento de los depósitos del 2%, apoyados en el fuerte crecimiento de los depósitos a plazo, del 12%, así como el continuo incremento del número de clientes. Los préstamos totales crecieron un 2%, hasta los 1,03 billones de euros, gracias a que el crecimiento en Consumo, CIB, Wealth y Payments compensó un pequeño descenso en Retail, explica la entidad.
El crecimiento de los ingresos fue superior al aumento de costes (+3% o -1% en términos reales), lo que permitió una mejora significativa de la ratio de eficiencia de 2,6 puntos porcentuales, hasta el 41,6%. Por su parte, Las dotaciones para insolvencias aumentaron un 8% como consecuencia de la normalización prevista en el negocio de Consumer, que además se vio parcialmente compensada por el buen comportamiento de Retail. En general, la calidad del crédito se mantuvo estable, con el coste de riesgo del 1,21%, en línea con el objetivo anual. La ratio de morosidad cerró el semestre en el 3,02%, por debajo del 3,07% del mismo periodo del año anterior.
La presidenta del grupo, Ana Botín, ha destacado que estos resultados demuestran que la entidad crece "de forma sostenible y rentable" gracias a su escala diversificación y a la ejecución de la transformación. "Seguimos invirtiendo para crecer en el futuro implantando nuestra propia tecnología, lo que nos garantiza que, además de ofrecer el mejor servicio a los clientes, mejoramos la eficiencia, y nos ha ayudado a lograr la mejor ratio de eficiencia en 15 años. En un entorno geopolítico volátil, confiamos en cumplir los nuevos objetivos gracias a nuestra diversificación de negocios y mercados, la solidez de nuestro modelo y a la calidad de los equipos, a quienes quiero agradecer nuevamente su gran trabajo", ha añadido.
Gracias a estos buenos resultados, que ya superan la previsión de los analistas, Santander ha mejorado sus objetivos para 2024 y ahora espera lograr un crecimiento de los ingresos a un dígito alto (frente al objetivo anterior de un crecimiento a un dígito medio); una ratio de eficiencia de alrededor del 42% (frente al anterior objetivo de una ratio por debajo del 43%), y un ROTE por encima del 16% (frente al 16% anterior). Por otra parte, mantiene los objetivos de coste del riesgo, aproximadamente el 1,2%, y de CET1 fully loaded por encima del 12% tras la implementación de Basilea III.
La reciente junta general de accionistas de Banco Santander aprobó un dividendo final en efectivo con cargo a los resultados de 2023 de 9,5 céntimos de euros por acción, pagado en mayo, lo que sitúa el dividendo total con cargo a 2023 en 17,60 céntimos de euros por acción, un incremento de aproximadamente el 50% frente al año anterior. El banco ha completado también dos programas de recompra de acciones con cargo a los resultados de 2023, por un importe total de unos 2.800 millones de euros. Santander ha recomprado aproximadamente el 11% de sus acciones en circulación desde 2021. Si el grupo alcanza todos sus objetivos de 2024, de acuerdo con la actual política de remuneración al accionista, la remuneración total al accionista con cargo a los resultados de 2024 superaría los 6.000 millones de euros.