En medio de un verano de altas temperaturas, la acumulación de aguas en el saladar de Aguamarga trae consigo una nueva ola de proliferación de mosquitos en Urbanova. La calma estival en esta zona ha sido interrumpida nuevamente por estos insectos, cuya presencia a última hora de la tarde en zonas tan visitadas como el paseo de la playa, ha despertado múltiples quejas entre los residentes de esta zona. Este fenómeno se ha intensificado, según indican desde la Mancomunidad de L’Alacantí, debido al incremento de agua estancada en los saladares cercanos, consecuencia de las recientes operaciones de la desaladora.