Desnutrida, temerosa, sangrando por la barbilla y con varias erosiones por el cuello y brazos. Así ha encontrado la Policía Local de Cádiz a una mujer al acudir a su domicilio después de que la hija de ésta alertara de que no la localizaba y de que había sido víctima de malos tratos con anterioridad por parte de su pareja. Cuando los agentes llegaron al domicilio, cuya puerta se encontraba abierta y en compañía de un testigo, vieron cómo una mujer salía del cuarto de baño sangrando por la barbilla mientras que el hombre se encontraba «tirado en el sofá» , según ha indicado el Ayuntamiento en una nota. La mujer respondió «temerosa y cabizbaja» a la pregunta de los agentes a la pregunta de si las lesiones que tenía se las había provocado el hombre que se encontraba en el sofá, que fue detenido luego por un delito de violencia machista. Los policías comprobaron que el domicilio se encontraba totalmente revuelto, muy sucio y desordenado, y vieron una correa de cuero ancha con hebilla dorada tirada en suelo junto a la cama de ella, lo que llamó la atención debido a que la víctima presentaba marcas y abrasiones antiguas en el cuello, las cuales, según el personal sanitario que se personó, podían ser perfectamente compatibles con la correa, al igual que otras muchas marcas que tiene por todo el cuerpo. La víctima aseguró que no podía atender llamadas de teléfono porque hacía tiempo que su pareja se lo había quitado . La víctima fue trasladada al hospital Universitario Puerta del Mar, donde fue atendida, mientras que el presunto maltratador pasó a disposición judicial tras incoar las correspondientes diligencias policiales.