El puente de cristal que unirá los distritos de Miraflores y Barranco está en su fase final de construcción y se espera que esté listo para ser inaugurado entre finales de octubre y principios de noviembre de este año. Así lo confirmó el alcalde de Miraflores, Carlos Canales, quien destacó que esta obra tendrá un costo superior a los 33 millones de soles.
Este nuevo corredor turístico, que promete convertirse en un atractivo emblemático de la ciudad, tendrá una extensión de más de 100 metros y estará equipado con ciclovías. La estructura incluye una sección intermedia hecha de vidrio templado de 12 milímetros de grosor, que separa la ciclovía del paseo peatonal y puede ser utilizada con precaución por los peatones.
"Esta es una obra muy importante para Perú. Es un puente que tiene 112 metros de longitud y 8 metros de ancho. Su base será de vidrio porque queremos que se convierta en un atractivo turístico, y lo más relevante es que será una continuación del corredor que empieza en Miraflores", expresó el alcalde de Miraflores en declaraciones para La República.
El vidrio templado que se empleará en la construcción del puente es de alta resistencia, capaz de soportar hasta 2 toneladas por metro cuadrado. Esta característica garantiza la seguridad de los usuarios que transiten por el puente, tanto ciclistas como peatones. La obra requerirá la instalación de cuatro vidrios similares, cada uno con la misma capacidad de resistencia.
Para llevar a cabo estos trabajos, ha sido necesario el cierre parcial de la bajada Armendáriz, desde las 8 de la mañana hasta las 5:30 de la tarde. En una fase posterior, se cerrará completamente esta vía durante cuatro días, de viernes a domingo, para permitir la instalación del puente con grúas de 1000 toneladas. Esta operación es esencial para colocar los grandes paneles de vidrio que conforman la estructura.
En relación con el distrito de Barranco, Canales comunicó que desde el 24 de junio se han comenzado los trabajos para habilitar los accesos necesarios para la excavación de los cimientos del arco que soportará el puente. Estas labores son fundamentales para garantizar la estabilidad y la durabilidad de la estructura.
"Los trabajos de estribos comenzarán una vez concluidas las labores de vaciado de la cimentación, a fin de brindar mayor seguridad a la obra y por procedimientos constructivos", indicó el burgomaestre Canales.
Cabe resaltar que este puente de vidrio no solo representaría un desafío técnico, sino también un atractivo turístico que promete convertirse en un ícono arquitectónico de la ciudad. Asimismo, la unión se llevará a cabo entre el malecón de la Reserva en Miraflores y el malecón Paul Harris en Barranco.
El nuevo puente, está inspirado en estructuras icónicas como el puente de cristal de Zhangjiajie en China, el renombrado Dragón Blanco en Vietnam, y el Glacier Skywalk en Canadá, estará apoyado en sólidas y enormes bases. Con una longitud de 100 metros, brindará una vista impresionante del océano Pacífico desde la Costa Verde.