El Gobierno valenciano ha abierto una investigación por un contrato menor para la instalación de puntos violeta en festivales de la Comunidad suscrito durante la etapa del anterior Ejecutivo autonómico liderado por el socialista Ximo Puig con la empresa Elig Consultoría Igualdad y Diversidad S.L., fundada por la hasta ahora directora del Instituto de las Mujeres, Isabel García . Un anuncio que se ha conocido este martes después de que el Consejo de Ministros cesara a García tras hacerse público que la empresa que comparte con su mujer recibió al menos 64 contratos de puntos violeta con ayuntamientos del PSOE, por los que habría facturado alrededor de 250.000 euros. La portavoz del Consell y consellera de Hacienda, Ruth Merino, ha dado a conocer este martes que el ejecutivo autonómico va a investigar ese contrato, firmado por el anterior gobierno del Botánico en mayo de 2023 -con finalización en septiembre del mismo año-, por un importe de 14.250 euros y que estaba dirigido a «cubrir el servicio de información, de asesoramiento, de prevención y de denuncia de los puntos violeta en festivales de la Comunidad Valenciana», según aparece recogido en el Portal de Transparencia de la Generalitat. Al respecto, Merino ha señalado que el contrato, adjudicado por la Vicepresidencia y Conselleria de Igualdad y Políticas Inclusivas, se llevó a cabo con la que entonces era la directora del Instituto Valenciano de las Mujeres, María Such , y que el Consell va a investigar «el uso que se les ha dado a los puntos violeta y el porqué de la contratación». La portavoz ha comentado que la investigación pretende determinar si hay indicios de que haya podido existir « algún tipo de trato de favor » y «por eso nos vamos a poner a trabajar». «Nos preguntamos si hubo más empresas que pudieran haber sido adjudicatarias de este contrato y saber en qué términos y con qué circunstancias acompañaron a la adjudicación de este contrato menor a esta empresa», ha aseverado. Del mismo modo, ha aseverado que, dado que García ha sido durante «muchos años» una «alta» dirigente del Partido Socialista, el Consell se ve en la obligación de examinar lo que está pasando para contarle a los valencianos «la verdad» .