En el contexto de la vuelta del impuesto a las Ganancias, una reciente medida ha marcado un hito significativo para muchos trabajadores en Argentina. Un grupo de empleados en relación de dependencia finalmente quedaron exentos de pagar ese tributo y seguirán sin abonarlo, ahora que ya salió la reglamentación en el Boletín Oficial.
La exención se centra en un grupo específico de empleados que realizan actividades esenciales para una industria clave en la economía argentina. Esta medida excluye explícitamente a personal directivo, ejecutivo y gerencial, asegurando que el beneficio se dirija específicamente a los operarios que desempeñan las funciones más técnicas y operativas en la industria.
La exención aplica específicamente al "personal de pozo" de la industria petrolera y gasífera. Este término incluye a empleados que realizan actividades como la exploración y perforación petrolífera o gasífera, tareas en boca de pozo, terminación, mantenimiento, reparación, intervención, producción, servicios de operaciones especiales y servicios de ecología y medioambiente.
Además, se reconoce como "personal de pozo" a los trabajadores que, aunque no se encuentren directamente en los pozos, desarrollan labores indisolubles a estas actividades, como la operación y mantenimiento de instalaciones necesarias para la producción de hidrocarburos.
Esta excepción quedó establecida en el paquete fiscal aprobado en el Congreso de la Nación, tras las negociaciones del Gobierno nacional con el Sindicato de Petróleo y Gas Privado de Río Negro, Neuquén y La Pampa. El gremio negoció con las autoridades nacionales y cámaras empresarias para eliminar lo que consideran el impuesto más injusto sobre el trabajo.
Marcelo Rucci, al frente del sindicato, destacó la importancia de esta exención para miles de trabajadores que contribuyen significativamente a la producción energética del país y al escenario de inversiones en Argentina.
La exención del impuesto a las ganancias para estos trabajadores alivia la carga fiscal de miles de familias, tras la vuelta del tributo para aquellos trabajadores solteros que cobren al menos $ 1.800.000 de salario bruto y $ 2.200.000 para casados.
La Ley 27.743 introdujo varias modificaciones a la Ley de Impuesto a las Ganancias. En particular, el artículo 82 define con precisión quiénes son considerados "personal de pozo". Además, la reglamentación establece mecanismos claros para la actualización de los montos exentos y las deducciones aplicables, ajustándose a la variación del Índice de Precios al Consumidor (IPC) según lo determine el INDEC. Este ajuste semestral garantiza que las exenciones y deducciones se mantengan relevantes y justas a lo largo del tiempo.
